Dos agentes de la Guardia Civil del Aeropuerto de Barcelona --uno de ellos lleva menos de un año en el cuerpo y está en periodo de prácticas-- reanimaron el pasado 8 de mayo a un pasajero que sufrió una parada cardiorrespiratoria en el control de seguridad de la Terminal 2.
En un comunicado este martes, han explicado que los agentes fueron alertados por un vigilante de seguridad que vio como un pasajero de mediana edad se desplomaba tras pasar el control y quedó "tendido en el suelo sin respiración y expulsando espuma por la boca".
Tras media hora practicándole primeros auxilios, el pasajero logró recuperar el pulso y la respiración, y fue trasladado hasta el Hospital de Bellvitge para un reconocimiento médico más exhaustivo.