Este martes se ha celebrado en 21ª de la Audiencia de Barcelona la primera sesión del juicio en el que se acusa a un enfermero de la clínica Plató de Barcelona por agresión sexual a una señora de 77 años.
Se le acusa al sanitario de un delito de agresión sexual y de otro de lesiones, para los que, además de la pena de cárcel, solicita una multa de 1.350 euros y una indemnización por daños físicos y morales de más de 26.000.
Hospital Clínic de Barcelona
El ministerio público, también acusa como responsable civil directo a la aseguradora del Hospital Clínic de Barcelona, centro al que señala como subsidiario, mientras que la defensa del procesado pide para él su absolución.
Hospital Clinic de Barcelona
Según el escrito de acusación, el 14 de diciembre de 2022, el acusado entró en la habitación de la anciana. Ella estaba boca abajo, esperando que el personal sanitario le cambiara el pañal.
Para no ser descubierto, cerró la puerta. Luego, la agredió sexualmente con un objeto para satisfacer sus deseos sexuales.
A pesar de que la víctima comenzó a gritar, el acusado continuó durante varios minutos. Después, se lavó las manos en un lavabo para pacientes y salió de la habitación.
La alerta de la anciana
En la sesión de este miércoles han declarado varias enfermeras y auxiliares que trabajaron con el acusado. Todas coincidieron en que la anciana estaba muy alterada y repetía: "Me han violado, me han violado".
Algunas sanitarias vieron que el pañal de la víctima estaba lleno de sangre, con coágulos. Una de ellas revisó sus manos para comprobar que no se había autolesionado.
Fachada del Palacio de Justicia de Catalunya, sede del TSJC y de la Audiencia de Barcelona.
Una de las testigos comentó la situación al acusado. Cuando este entró en la habitación, la anciana lo señaló como el responsable.
Aunque la víctima lleva ocho años incapacitada, las testigos afirmaron que hablaba con coherencia y no inventaba historias. Además, la describieron como una persona afable.
También les llamó la atención que la puerta de la habitación estuviera cerrada. A una de ellas le sorprendió ver al acusado lavándose las manos en el baño de la habitación, ya que el personal de enfermería debe hacerlo en una zona controlada para evitar la propagación de enfermedades.
El juicio
El juicio está previsto que continúe mañana jueves en una segunda sesión.
Testificarán tanto los médicos que examinaron a la víctima como el acusado quien ha solicitado hacerlo en último lugar. En cuanto al testimonio de la víctima, se ha acordado su declaración en la instrucción como prueba preconstituida.