La crisis del baloncesto llega a las altas esferas del FCBarcelona. El presidente del club, Josep Maria Bartomeu, exige soluciones drásticas e inmediatas en una sección muy deficitaria (más de 20 millones de euros anuales) y decadente en la parcela deportiva. Nacho Rodríguez, ex jugador del Barça, ha recibido el encargo de regenerar un modelo que no funciona y en los próximos meses podría cortar hasta 10 cabezas. Algunas ilustres.
Renfroe, Munford, Lawal, Perperoglou, Faverani, Oleson y Navarro acaban contrato el 30 de junio. Los seis primeros están prácticamente sentenciados y en el club hay muchas dudas sobre la continuidad del capitán. Navarro cumplirá 37 años en junio y en las últimas temporadas ha tenido muchos problemas físicos.
El Barça también podría buscar una salida a Diagné y contempla la posibilidad de cortar su vinculación con Ante Tomic y Justin Doellman, cuyas fichas rondan los dos millones de euros anuales. El ala-pívot norteamericano acaba contrato en 2019, pero el club tiene una opción para rescindirlo a finales de temporada. La actual alianza con el pívot croata termina en 2018.
EL FICHAJE DE JASIKEVICIUS
Nacho Rodríguez activará la gran revolución cuando acabe la temporada. El desenlace de la Liga ACB condicionará el futuro de Georgios Bartzokas. El técnico griego ha contado, hasta ahora, con la protección de Rodrigo de la Fuente, pero el nuevo director de gestión se mostró muy ambiguo cuando le preguntaron por la continuidad de Bartzokas durante su presentación oficial.
El exbase del Barça, según ha podido saber Metrópoli Abierta, quiere abordar el fichaje de Sarunas Jasikevicius como nuevo técnico azulgrana. Considera que el modelo de Bartzokas no encaja bien en el Palau y prefiere al técnico lituano por su conocimiento del club, por su baloncesto más desenfadado y por su compromiso para promocionar a los jóvenes talentos de la entidad.
La contratación de Nacho Rodríguez ha sido un duro golpe para Rodrigo de la Fuente. El director deportivo tendrá menos poder y algunas fuentes aseguran que podría ser despedido en junio si el equipo fracasa en la Liga ACB.