Dos buenas noticias y una mala en Butarque. Ganó el Barça y Luis Suárez marcó los dos goles del líder contra un Leganés con más fútbol que pegada. Valverde, sin embargo, no podrá contar con Piqué tras ser amonestado con una tarjeta amarilla por agarrar y derribar a Amrabat. En Valencia, el técnico tendrá que recomponer su defensa. Umtiti y Vermalen, dos zurdos, podría ser la pareja de centrales de la próxima semana.
Suárez ha aprovechado el parón liguero para sanar su rodilla y ganar autoestima. En Leganés, en un partido trampa, el delantero uruguayo marcó los dos primeros goles del Barça en un duelo en el que encontró un factor adicional para motivarse: Cuéllar. El portero del Leganés le retó constantemente y provocó que fuera amonestado, pero su respuesta fue contundente. En Butarque volvió la mejor versión de Suárez, perfectamente secundado por Alcácer, disciplinado en labores defensivas e incisivo en ataque.
PAULINHO TAMBIÉN MARCA
El partido, con muchos altibajos, también constató que Ter Stegen es el mejor portero para el Barça. El alemán, una vez más, solucionó todas las situaciones de emergencia. Con los porteros cambiados, en Butarque hubiera ganado el Leganés. Messi, por un día, tuvo una actuación muy discreta y Paulinho, uno de los socios favoritos del argentino, marcó el tercer tanto.
La peor noticia, sin embargo, fue la tarjeta amarilla de Piqué. Un minuto después de que marcara Suárez el primer gol, el central internacional forcejeó con Amrabat. Piqué agarró al delantero del Leganés y la amonestación le impedirá jugar en Mestalla. Será otra cita de alto riesgo para el Barça, que suma de tres en tres y se afianza en lo más alto de la clasificación. Sin grandes alardes, pero con mucha solvencia