Seguramente nos dejamos algunos, porque Barcelona es una ciudad en la que se comen muchos y muy buenos arroces. Pero sin duda estos diez establecimientos, algunos de toda la vida y otros de más reciente apertura, son valores seguros a la hora de comer un buen arroz en la Ciudad Condal. La Barceloneta sigue siendo el lugar para reivindicar los arroces marineros, aunque existen propuestas en otros barrios que también merece la pena tener en cuenta. Aquí van nuestros diez:
1- CA LA NURI
Probablemente los mejores arroces de la ciudad se encuentran en este restaurante de batalla ubicado a pie de mar en la Barceloneta. El de Ca la Nuri es un arroz contundente, sabroso, sofisticado, ese arroz al dente que tanto nos cuesta lograr en casa, que puede acompañarse de unos entrantes marineros que van desde los mejillones a la plancha y algunas incursiones en la cocina asiática, como el ceviche con mango, cebolla morada y cilantro. Nuestra opción preferida es su Arròs Ca la Nuri, en su punto, aunque tienen también un arroz negro con gamba roja y sepia que es una explosión de sabor y un derroche de equilibrio. Aquí dominan la técnica al detalle, y se atreven a innovar con creaciones como el arroz con verduras de temporada, ideal para veganos. ¿Uno de nuestros preferidos? Un curiosísimo arroz cremoso, delicioso, con gamba y sepia. Para los fans, la factoría Ca la Nuri cuenta con otros dos locales en Barcelona: Xiroi Ca la Nuri, en la zona de la Mar Bella, y Terra Ca La Nuri, en L'Eixample.
Ca la Nuri. Passeig Marítim de la Barceloneta, 55.
2- MANÁ 75
Es un recién llegado al mundo del arroz en la Barceloneta y ha entrado por la puerta grande a competir con los viejos tótems en calidad y 'savoir faire'. Y es que Maná 75 enamora por muchos motivos. Por su amplio comedor, luminoso y colorido, con su ajetreada cocina a la vista. Por sus paellas clásicas (la del senyoret, la de bogavante...) y por otras más originales y sorprendentes (el arroz de montaña con butifarra y costilla o el de verduras de temporada). Por la gentileza de su equipo, sus croquetas de ibérico, su coca de escalibada, el carpaccio de wagyu, las bravas Maná 75... Ojo con ellas: crean adicción.
Maná 75. Passeig Joan de Borbó, 101
3- LA MAR SALADA
A pocos metros del Suquet, también en el siempre concurrido Passeig Joan de Borbó, encontramos este local que se ha convertido en un referente paellero en la Barceloneta. Su terraza, siempre hasta los topes, es el lugar ideal para verlas venir mientras degustamos entrantes que van desde unas croquetas buenísimas a unas navajas con panceta y piñones o una bomba, cómo no, elaborada en este caso con butifarra negra. Entre sus arroces, nos quedamos con su delicioso meloso de bogavante, o con el del senyoret, que llega a la mesa con todos los pescados y mariscos convenientemente pelados. Si no nos apetece arroz, tienen una fideuà con gambita blanca, fresquísima, también la mar de interesante.
4- L'ARROSSERIA XÀTIVA
Cuando pensamos en arroces y verano siempre nos viene a la cabeza una terraza con el mar de fondo, pero se pueden comer paellas increíbles en pleno meollo barcelonés durante todo el año. L'Arrosseria Xàtiva es el lugar para reservar mesa y compartir algarabía con los nuestros frente a un arroz de nota, que comeremos con “cullereta”, como manda la tradición valenciana. Tienen también ensaladas, pescados, carnes y mariscos, aunque es obligatorio hacerse con una paella elaborada con arroz del Delta. Aquí no encontraremos sorpresas: solo un arroz delicioso, perfecto, y un ambiente siempre festivo y familiar. Y quién necesita más. Tienen dos locales, uno en Les Corts y otro en Gràcia, y el grupo cuenta, además, con otro restaurante la mar de interesante que ofrece también arroces notables: La Tertúlia (Morales, 15), que puede presumir de una de las terrazas con más encanto de Les Corts.
Torrent d'en Vidalet, 26 / Bordeus, 35.
5- TERRAZA MARTÍNEZ
Un chiringuito en plena montaña de Montjuïc, en un bonito entorno al lado del Hotel Miramar, con vistas al Mediterráneo desde las alturas y unos arroces de gran nivel. La propuesta no puede ser más original, y ha calado a la perfección entre turistas y locales, que hacen cola para ocupar una de las mesas con vistas de Martínez. Este chiringuito de montaña es ese lugar para visitar en familia, para que los niños correteen por las inmediaciones, y donde disfrutar de un arroz al fresco en un ambiente chic a dos pasos del centro. Martínez cuenta con más de 25 variedades de arroces, y tienen uno estilo “cullereta” para comer directamente de la paella (un must). Destacan los clásicos como la paella valenciana, un buen risotto de bacalao o la caldereta de arroz con bogavante, que comparten protagonismo con otras más sui generis, como la paella de verduritas ecológicas o la de cebolla ecológica caramelizada. Su carta de vinos, completa y con algunas sorpresas agradables, nos confirma que en Martínez saben muy bien lo que hacen.
Ctra. Miramar, 38.
6- XIRINGUITO ESCRIBÀ
Otro clásico cuando la cosa va de comer un arroz de nota frente al mar en un entorno sofisticado y elegante, tan alejado del ambiente chancletero de otros chiringuitos. Escribà es una garantía de esos arroces que siempre salen bien, uno de esos locales que nunca defraudan al que podemos llevar a cualquiera, desde una cita romántica a una reunión familiar o un encuentro entre amigos. Decorado con motivos marineros, amplio, luminoso y siempre agradable, en Xiringuito Escribà podremos disfrutar de buenos arroces y fideuás, entre los que destacan un meloso de pulpo sensacional, un caldoso de pescado y la popular paella de l'Escribà. Aunque la especialidad es el arroz, no podemos abandonar este templo de la cocina marinera sin hacernos con alguna de sus tapas fetiche: nos gustan especialmente la brandada de bacalao o los chipirones estrellados con jamón ibérico, parmesano y aceite de albahaca. Por no hablar, claro, del siempre solvente pescaíto frito.
Av. del Litoral, 62.
7- ARROZ HOFMANN
Que la gente de Hofmann toca bien todos los palos es algo que ya sabíamos, pero que nos confirma su flamante arrocería del Passeig Sant Joan en la que todo es posible. Desde un arroz de bogavante frito con jamón a uno de habitas a la catalana, un risotto de gambas con jugo ardiente ahumado o una fideuá de carabinero y boletus. Pero la carta de este establecimiento de referencia es mucho más que arroces. Son pescados, con su suquet de calamares y gambas. Y cocina fresca de temporada, con su salteado de verduras y hortalizas o la cazuelita de guisantes frescos y pulpo. Y es también esa cocina de siempre actualizada, como demuestran las croquetas de bacalao con ajoarriero y pil pil, entre otras propuestas. Para acabar con algo dulce, no podemos irnos de Hofmann sin probar su tiramisú de primavera.
Arroz Hofmann. Passeig de Sant Joan, 36.
8- EL RACÓ DEL MARINER
Hubo un día en que este restaurante de referencia era propiedad de unos pocos, un reducto de pescadores ubicado en pleno puerto donde hacían unos arroces riquísimos y muy baratos teniendo en cuenta los precios de la zona. Poco a poco, llegó la popularidad, las colas y, por motivos de licencias, el cambio de local. Ahora El racó del mariner se encuentra en el Port Fòrum de Sant Adrià del Besòs, en un extraño enclave en medio de la nada, tranquilo y agradable, alejado del ajetreo de las zonas más turísticas. Y no ha perdido ni un ápice su calidad, aunque tal vez sí algo de aquel encanto de cuando se encontraba en plena lonja y solo lo conocían unos pocos. Sus pescados fresquísimos dan lugar a grandes arroces, desde su paella marinera clásica al caldoso de bogavante (imprescindible), aunque tienen también excelentes pescados fritos o a la plancha. Si tienen sardinas, no dejéis de haceros con una ración.
Port Forum, Carrer port esportiu, Local 1.
9- CAN SOLÉ
Más de un siglo lleva abierto este restaurante de la Barceloneta donde no solo bordan los arroces, sino que tienen una buena selección de pescados y mariscos frescos, platos de cuchara y alguna opción de carne para los amantes de la proteína animal. Ir a Can Solé es siempre garantía de prestancia y savoir faire, pues el local, elegante y marinero, ha sido a lo largo de los años uno de los grandes tótems para degustar un buen arroz en plena Barceloneta. Tienen rarezas como el caldoso con erizos y vieiras, el arroz a banda con patas de cangrejo rojo real noruego, los fideos con bogavante y un señor arroz negro que se encuentra entre los mejores de la ciudad. ¿Una curiosidad? La cocina de este local la regenta una chef, Mari Carmen Duran, que lleva la batuta –y qué bien la lleva– desde mucho antes de que se hablase de cuotas y feminismo.
Sant Carles, 4.
10- BARCELONETA
Cocina marinera con hermosas vistas al muelle en un local abierto en 1996 que en todos estos años no ha perdido ni un ápice de su esencia y ha mantenido buena parte de sus platos. Barceloneta es el restaurante por excelencia al que ir a comer una paella frente al mar, ese local que nos viene a la cabeza prácticamente de forma automática cuando pensamos en verano, playa y arroz. Y qué arroz. Elaborados con pescados y mariscos recién llegados de las lonjas, los arroces de Barceloneta nos llaman por nuestro nombre en cualquier momento del año, pero especialmente en verano: desde el caldoso de pescadores al negro con sepia, el rossejat de fideos o su característica paella de pescado y marisco. Disponen también de una amplia selección de pescados y de numerosas opciones de carne, que convierten a este restaurante en un todoterreno en cualquier ocasión. Es imprescindible dejar siempre sitio para el postre, pues son todos artesanales y muy ricos.
Escar, 22. Moll dels Pescadors – (Port Vell)