“La fama cuesta, pues aquí es donde vais a empezar a pagar, con sudor”. Esta es una frase mítica de la serie estadounidense Fama que, muy probablemente, la mayoría de los jóvenes que han hecho cola para apuntarse al casting de Operación Triunfo no han oído en su vida. La frase, pronunciada por la profesora de baile que interpretaba Debbie Allen, fue durante muchos años recurrente para referirse a lo difícil que era alcanzar los objetivos que se marca una persona.
Los más de 2.000 jóvenes en busca de la fama que se han presentado al casting que OT ha hecho en Barcelona suponen el triple de los que lo hicieron en la anterior edición, una muestra evidente de que el programa no ha perdido ni un ápice de su atractivo entre el público juvenil. La larga cola que se ha formado alrededor del Estadi Olìmpic Lluís Companys evidencia que el proyecto televisivo mantiene vivo su interés entre los aspirantes a suceder en el podio del éxito a los Bisbal, Rosa, Chenoa, Bustamante, Cepeda, Edurne, Beth o Amaia.
La primera criba la han vivido ante un equipo de expertos formado por Noemí Galera, Ismael Angulo y Pablo Wessling. Han llegado las primeras decepciones y las primeras alegrías, aunque, como recuerda la frase que encabeza esta información, el camino es muy largo y muy difícil... si no se busca la fama efímera.
Una de las responsables de esta primera criba, Noemí Galera ha afirmado que los profesores de esta nueva edición de OT serán los mismos que los del año pasado y ha asegurado que su intención al hacer el casting actual es lograr que los que se presentan sean ellos mismos.
A los que superen esta primera fase del casting le quedará presentarse a la siguiente fase, que será a puerta cerrada. Barcelona ha sido la primera de las citas que se llevan a cabo para elegir a los que participarán en el programa. El resto de las citas tendrán lugar en Valencia, Mallorca, San Sebastián, Vigo, Tenerife, Málaga, Sevilla y Madrid, y durará hasta el 10 de julio