Una parte de las instalaciones deportivas del Vall d'Hebron-La Teixonera, situadas en la calle de la Granja Vella, se encuentran totalmente dejadas de la mano de Dios. La Federació Catalana de Futbol ha prohibido jugar en un campo de fútbol 7 por seguridad ante el elevado riesgo de lesión que supone. Los vestuarios, situados en barracones, tampoco presentan un mejor aspecto. Las duchas están oxidadas y sucias, hay picas que en cualquier momento se pueden caer y agujeros en el suelo que son un riesgo para las personas que los utilizan. Los usuarios están recogiendo firmas para presentar una queja ante el Ayuntamiento de Barcelona.
El equipamiento es de titularidad municipal, pero la gestión la lleva desde hace dos años la Fundación Marcet, explica Javier Edrosa, consejero de distrito de Ciutadans y padre de un chico que juega al fútbol allí. Las instalaciones del Vall d'Hebron-La Teixonera las utilizan centenares de personas de distintos clubs, entre ellas menores de edad, entre cuatro y 18 años. Edrosa ya se ha quejado como padre al distrito de Horta-Guinardó en distintas ocasiones, pero el gobierno municipal se excusa en que hay una concesión y que tiene que ser la Fundación Marcet quien resuelva la situación. “El Ayuntamiento tendría que controlar que los campos y los vestuarios estén en buen estado, y ahora no se hace”, denuncia el consejero de Ciutadans, que ya criticó la situación en las redes sociales el pasado junio.
FÁCIL LESIONARSE
Según Edrosa, el equipamiento dispone de un campo de rugby, varios campos de fútbol, pistas de pádel y un campo de fútbol 7. Este último es en el que la federación catalana ha prohibido jugar por el lamentable estado, aunque, en ocasiones, hay equipos que lo utilizan para entrenar. Como muestran las imágenes que acompañan esta información, el césped está lleno de agujeros. La hierba se levanta en muchas partes, al igual que las tiras colocadas sobre el suelo para marcar las líneas del campo. “Es muy fácil lesionarse”, advierte Edrosa, que asegura que no ha visto en todo el distrito unas instalaciones tan dejadas como éstas.
Las pésimas condiciones no acaban aquí. Muchos de los menores y adultos que utilizan la zona deportiva se tienen que cambiar desde hace años en un barracones con vestuarios y duchas insalubres, sucias y peligrosas. De hecho, recientemente, un niño cayó en el suelo, aunque por suerte apenas se hizo daño. Lo peor de todo es que las instalaciones deportivas, situadas en la calle de la Granja Vella 10-12, “tienen otros vestuarios que casi no se utilizan porque solo hay una persona de mantenimiento para todo el equipamiento”, afirma Edrosa. En su caso paga 600 euros al club al que pertenece, a quien la Fundación Marcet cobra un alquiler por utilizar el complejo deportivo.
NECESIDAD DE UNA REFORMA INTEGRAL
La Fundación Marcet reconoce que algunas de las instalaciones se encuentran en un estado “deficitario” y alega que cuando empezó a gestionar el complejo, éste ya se encontraba así. El contrato, que Marcet tiene con el consistorio, no contempla hacer obras estructurales “sino pequeñas reparaciones y trabajos de mantenimiento", dicen desde la Fundación. Marcet asegura que han comunicado al Ayuntamiento la necesidad de hacer una reforma integral para dejar la zona deportiva en unas condiciones óptimas. Finalmente, Marcet añade que el contrato que tiene vence el 31 de mayo y aunque hay prevista una prórroga no sabe si continuará.
Fuentes vinculadas al sector deportivo de la ciudad han calificado las fotos de las instalaciones de “tercermundistas” y aseguran que nunca habían visto una zona deportiva municipal en tan mal estado. “El Ayuntamiento tiene los instrumentos para no permitir esto. Puede hacer visitas y existe una comisión de control de cada complejo deportivo. A otros gestores por mucho menos, el consistorio los tiene masacrados”, subrayan las fuentes, que reconocen que estos campos del Valld'Hebron-la Teixonera presentan problemas estructurales desde hace años, incluidos el de Rugby, en el que juega el Barça, entre otros equipos.
EL ABANDONO DE LAS INSTALACIONES, A COMISIÓN
La regidora de Ciutadans, Marilén Barceló, tiene intención de llevar el abandono de la instalación a la próxima Comisión de Derechos Sociales y Deportes. “Tenemos constancia de que estas condiciones lamentables se dan en otros distritos. Pediremos un informe con las obras y el presupuesto ejecutado en los diferentes equipamientos municipales, así como un plan de choque para resolver los problemas más graves”, ha explicado Barceló.
La edil ha considerado inadmisible que una ciudad que fue olímpica en 1992 cuente con instalaciones en la que actualmente los menores no pueden practicar deporte en plenas condiciones” y ha instado al gobierno de Ada Colau a resolver la situación. “El Ayuntamiento no puede ser cómplice del lamentable estado de los equipamientos municipales que tienen que estar al servicio de los vecinos. El gobierno populista de Colau, que habla de igualdad de oportunidades, debe predicar con el ejemplo”.