El Macba toma prestado el término que acuñó el historiador británico Eric Hobsbawm, Un siglo breve, para su nueva exposición permanente. A través de una selección de obras comprendidas entre la Primera Guerra Mundial (1914) y el fin de la Unión Soviética (1991), la organización articula un itinerario alrededor de las tensiones que se produjeron en el campo de la historia del arte durante este periodo, a través de algunos de los trabajos que más relevancia tuvieron durante esas nueve décadas.
El visitante podrá disfrutar de una muestra de 350 obras, comisariadas por el propio Macba con el objetivo de dar nuevas respuestas a la concepción clásica de la historia del arte, al mismo tiempo que ofrece nuevas perspectivas para afrontar la importancia y relevancia de la ciudad de Barcelona en este campo.
UNA COLECCIÓN DINÁMICA
El espectador podrá disfrutar de una colección dinámica en la que, como si de un ente orgánico se tratase, las obras escogidas para ilustrar este periodo irán alternándose con el fin de poner énfasis en determinados momentos históricos, tratando de ahondar más en profundidad en ciertos contextos y situaciones vividas. A través de esta experiencia, el Macba pretende aportar una nueva perspectiva sobre las diferentes etapas que ha recorrido la ciudad a lo largo de los últimos noventa años por medio del análisis del discurso artístico de algunas de las figuras internacionales más relevantes, como Bahaus Josef y Anni Albers.
El inicio del itinerario de Un siglo breve lo conforman las serigrafías de Anni Albers, además de las obras de Alexander Caldery y Joaquín Torres-García. El nucleo de la exposición versa en torno al año 1968 y su contexto social y político. Ocupando la muestra más amplia con motivo del 50º aniversario de todos los hechos que ocurrieron entonces. También tiene especial importancia lo ocurrido en el año 1975 con la muerte de Franco.