La Noche de los Museos ha empezado y, hasta la 1 de la madrugada, decenas de centros museísticos en toda la ciudad, desde los más emblemáticos a los más desconocidos, han abierto sus puertas para dar a conocer a los visitantes sus obras de arte.
Lo más difícil, sin duda, es escoger bien la ruta. Ya que es imposible evitar las colas, lo mejor es fijarse uno o dos objetivos y aprovechar el tiempo lo mejor posible.
A elección del visitante hay grandes exposiciones, como las de La Luz Negra, en el CCCB, y Farsa y Artificio, en el Macba. Dos de los centros que habitualmente están más llenos.
También son aconsejables la colección del Renacimiento y Barroco o la exposición sobre William Morris, ambas en el MNAC. Y para ir con los niños, la muestra que sobre el mundo de Disney hace el Caixaforum.
Otras muestras destacadas, la Beehave, en la Fundación Joan Miró, o la que sobre los dinosaurios tiene lugar en el Cosmocaixa.
Igual de interesante es visitar los restos romanos de la ciudad, o visitar algunas de las edificaciones más interesantes de Barcelona, algunas de las cuales, como la Casa Vicens o el Espai Subirats, dedicado a la obra del escultor que muestra más de un centenar de este polifacético artista, abren por primera vez sus puertas en este noche.