Un médico del Clínic estalla: "Estamos hartos de trabajar en condiciones penosas"

El Hospital Clínic de Barcelona ha sido todo un referente en la lucha contra el coronavirus desde que se detectó el primer caso en Cataluña. Centro de referencia en epidemiología, el Clínic fue el hospital donde se derivaron los primeros pacientes diagnosticados con el virus SARS-CoV-2. Muchos de sus médicos se han contagiado durante el combate contra el coronavirus, los mismos que están en la primera línea de la lucha contra esta pandemia. 

Estos mismos médicos y el resto del personal sanitario alertan desde hace días de las precarias condiciones de trabajo bajo las que operan. En un vídeo al que ha tenido acceso este medio, uno de sus médicos denuncia el "material de batalla" que utilizan en las urgencias del Clínic de Barcelona. 

"HÉROES CON CAPA Y SIN CAPA"

El facultativo muestra "un gorro irrisorio" y una "bata porosa y que se rompe", con un corte visible en la manga. De forma irónica, destaca que "por suerte divina" disponen de "una mascarilla FFP2 y una mascarilla quirúrgica para protegerla". 

El sanitario, visiblemente enfadado, explica sin tapujos la razón de ser del vídeo: mostrar que están "hartos de trabajar en condiciones penosas, que la gente lo vea bien claro". El médico prosigue con su mensaje: "Ni somos héroes con capa ni sin capa. Somos sanitarios que queremos material adecuado para hacer una atención adecuada".  

AL LÍMITE

Este nuevo vídeo se suma a una larga lista de quejas de los sanitarios del Clínic. Hace más de una semana, dos importantes médicos del hospital barcelonés, el jefe de cirugía gastrointestinal, el doctor Antonio de Lacy, y la oncóloga e investigadora Cristina Nadal lanzaron una advertencia pública a través de las redes sociales. 

Ambos facultativos iniciaron una campaña ciudadana para recaudar fondos para poder comprar el material que necesitan. "No tenemos ni mascarillas ni batas", aseguró De Lacy. El doctor afirmó que el Clínic es un hospital de "pionero y líder en muchas cosas", que cuenta con unos protocolos muy claros para afrontar situaciones como la pandemia, pero no los pueden aplicar, entre otros motivos por falta de recursos.