La Burg desaparece. La hamburguesería situada en el número 55 de Sant Joan Bosco, cerca de plaza Artós, baja la persiana definitivamente. Según ha podido saber este medio, Crep Nova ocupará su espacio.
La cadena de creps y pizzas ha alquilado el local, de unos 120 metros cuadrados, para abrir una dark kitchen –sin abrir al público, únicamente para delivery--. La nueva adquisición por parte de Crep Nova se enmarca en su estrategia de expandirse a través del reparto a domicilio.
La familia Farrés, propietarios de la cadena, cuenta con el apoyo de la sociedad Papanut, de Andreu Costafreda, y con el fondo Salomon 1965, de la familia Serra Moreno. La entrada de los nuevos inversores –realizada este año-- tiene como objetivo crecer con el reparto a domicilio por toda España. Para este propósito han creado la sociedad Crep Nova Delivery y se han asociado con Glovo como plataforma de reparto.
LEGADO DE LA BURG
El local de Sant Joan Bosco estaba ocupado hasta ahora por La Burg. El restaurante se inauguró en octubre de 2008. Rápidamente se granjeó la fama entre los barceloneses por sus elaboradas hamburguesas y gintonics, una combinación jovial que resultó un éxito durante sus 12 años de trayectoria. Además, La Burg fue pionera en ofrecer hamburguesas gourmet --con carne 100% de buey-- que después fue imitada por otras cadenas.
Esa es la huella que dejan en la ciudad sus creadores, Adrián Milá y Claudio Hoyos, en la restauración barcelonesa.