Captada una nueva ballena en la costa catalana. Con la llegada de la primavera es habitual observar los cetáceos cerca de la capital catalana y los pueblos cercanos. En esta ocasión, el gigante animal ha sido captado a seis millas de Vilanova i la Geltrú. En la costa del Garraf (Barcelona) es habitual observarlas esta época del año, lugar de paso de las ballenas.
LLEGADA TEMPRANA
Este año las condiciones oceanográficas y meteorológicas y por ende tróficas, parecen haber influido muy favorablemente a la llegada temprana de los rorcuales, aseguran desde Edmaktub, que investiga estos grandes mamíferos marinos. Este año, estos grandes mamíferos han adelantado su llegada más que en anteriores temporadas y además siendo abundante su presencia.
Las ballenas de aleta siguen una ruta migratoria estacional. En invierno los animales se pasean por la franja sur del mediterráneo. Durante la primavera nadan hasta las costas ibéricas hasta llegar al Golfo de León y el Mar de Liturgia y en verano permanecen allí para aprovechar la elevada productividad de la zona.
AVISTAMIENTO DE BALLENAS
Hace aproximadamente dos semanas cinco ballenas también fueron vistas en la costa del Garraf. El avistamiento ha confirmado la presencia anual de ballenas en la costa catalana, adonde acuden cada año para alimentarse, aunque este se han adelantado respecto a otros años, según la asociación Edmaktub.
La asociación ha iniciado su octava temporada del Proyecto Rorcual, que ha confirmado, tras ocho años de trabajos, la presencia anual de ballenas en las costas catalanas, adonde acuden para buscar el alimento que marca las variaciones en la cadena trófica e identificando los lugares de mayor riqueza y mejores condiciones medioambientales. Hasta ahora, el proyecto ha identificado 132 ballenas distintas en la costa del Garraf, un 10% de ellas avistadas reiteradamente en distintos años.