Para los propietarios de viviendas la posibilidad de poner en alquiler su casa o local comercial es una manera sencilla y eficaz de sacar rentabilidad. Sin embargo, también existen una serie de riesgos y tensiones que, antes de elegir al inquilino y firmar el contrato de arrendamiento, se deben tomar en consideración cautelosamente para evitar problemas futuros.
Unas tensiones, como el impago, que se experimentan un momento de crecimiento exponencial debido a la crisis provocada por el Covid. Ante esta problemática creciente, se ha presentado en el mercado Base de Datos de Morosidad Inmobiliaria (BDMI), una empresa constituida en 2019 y participada por Idealista. Su objetivo es recoger toda la morosidad inmobiliaria para fomentar la transparencia y confianza de las partes involucradas durante el proceso de alquiler, así como procesar y analizar el riesgo de morosidad en el alquiler de bienes inmuebles.
CLÁUSULA ANTIMOROSIDAD
Con esta herramienta, a través de la página web de la compañía, se puede incluir la cláusula de Idealista antimorosidad en los contratos de alquiler de vivienda, añadir inquilinos morosos a la base de datos de morosidad inmobiliaria (BDMI), así como consultar potenciales inquilinos morosos.
Los profesionales inmobiliarios que utilicen el servicio de consulta de morosidad podrán consultar si los potenciales inquilinos aparecen registrados en el fichero de BDMI, contando también con resultados provenientes del registro público (BOE), el fichero de siniestralidad que usan las aseguradoras, el Fichero de Impagados (ICIRED), y el Registro de Impagados Judiciales (RIJ). De esta manera protegerán de forma efectiva a sus clientes contra posibles impagos.
SEGURIDAD PARA EL PROPIETARIO
Conectarse a ella es muy sencillo, tan solo hay que acceder a la web BDMI e incluir la cláusula al contrato de alquiler de vivienda, para evitar a los inquilinos morosos recurrentes, que le indica al inquilino que puede ser incluido en el registro de morosos de Idealista si no paga la renta. Si un candidato decide no firmar el contrato por el hecho de incluir esta cláusula, el propietario debe evaluar si se lo alquila o no.
Si el inquilino en un futuro incurre en el impago el propietario sólo habrá de añadirlo en el registro, lo cual hará que el moroso lo tenga más difícil para alquilar, pues las agencias que trabajen con esta base de datos sabrán que es moroso.
SALIR DEL REGISTRO
Los profesionales inmobiliarios que utilicen el servicio de consulta de morosidad podrán consultar si los potenciales inquilinos aparecen registrados en el fichero, que cuenta también con resultados provenientes del BOE, el fichero de siniestralidad que usan las aseguradoras, el fichero de impagados (ICIRED), y el Registro de Impagados Judiciales (RIJ). De esta manera protegerán de forma efectiva a sus clientes contra posibles impagos.
Con todo, la herramienta permite salir del registro una vez se hayan saldado las deudas. Para ello, la persona incluida en el registro de morosidad debe enviar un justificante de pago a BDMI, al acreedor o a ambos, y el equipo legal comprobará si ha pagado, y en caso de haber saldado su deuda, se eliminará de las bases de datos de BDMI.