Una veintena de mujeres transexuales se operan cada año en el Hospital Clínic de Barcelona para cambiar su tono de voz. El Clínic es pionero en practicar glotoplastias, que se hacen a través de la boca y no requieren incisiones. De hecho, es el único hospital de Cataluña que tiene activo un programa en glotoplastias, el proceso quirúrgico a través del cual las mujeres transexuales pueden tener una voz más femenina, dentro de la sanidad pública.



El programa se lleva a cabo en la consulta especializada de voz del Servicio de Otorrinolaringología, por parte de los otorrinolaringólogos Isabel Vilaseca y Eduardo Lehrer, y la logopeda Marta Jordana, que forman parte del Instituto Clínico de Especialidades Médicas y Quirúrgicas, dirigido por Josep María Segur.

INTEGRADO EN EL CATSALUT

Hace cuatro años, el Clínic hizo un estudio piloto con ocho pacientes y actualmente el programa ya forma parte de la cartera de servicios de CatSalut, programa al que se acogen una veintena de pacientes cada año.



Según ha informado el hospital, la cirugía de las glotoplastias se acompaña de una reducción del volumen de la cuerda vocal con láser, dura una hora y media y se hace sin necesidad de incisiones, puesto que todo el procedimiento se realiza a través de la boca.

IMPORTANCIA DE LA VOZ

Según los especialistas, la voz en la mujer transgénero es esencial para conectar de forma coherente el aspecto exterior con su personalidad.



La voz femenina posee varias calidades específicas en cuanto a agudeza, timbre, modulación, intensidad, gestualidad e incluso vocabulario, que hacen asignarla rápidamente al género femenino, por lo que es imprescindible trabajar todos los aspectos de manera coordinada con la ayuda de un equipo experto.



Los especialistas del Clínic aseguran que la glotoplastia no tiene contraindicaciones absolutas, aunque es preferible hacer la intervención en cuerdas vocales sin patología previa para conseguir resultados más óptimos. No hay una edad límite para la feminización vocal y cada caso es individualizado.

 

OPERACIÓN

El programa incluye una exploración exhaustiva de la laringe para descartar patologías asociadas, el tratamiento logopédico específico para feminizar la voz, la cirugía, si el tratamiento logopédico no ha sido suficiente, y una rehabilitación vocal posquirúrgica.



La operación, que se hace con anestesia general, consiste en modificar la medida de las cuerdas vocales, puesto que la laringe de las mujeres es más pequeña que la de los hombres.



Para ello, los otorrinolaringólogos practican dos puntos de sutura en la comisura y el tercio anterior de las cuerdas vocales para acortarlas unos milímetros, y con el láser, aumentan su tensión y reducen la masa para que la voz suene más aguda. Después de la operación las pacientes acostumbran a estar 24 horas ingresadas y continúan la recuperación de la operación, que es irreversible, en casa durante 10 días y en silencio. 

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