Arranca el Festival Cruïlla en Barcelona: 25.000 personas al día sin distancia y con test
Abrirán el evento Kase.O, Natos y Waor y Lágrimas de Sangre, entre otros
8 julio, 2021 08:56Noticias relacionadas
El Festival Cruïlla empezará este jueves una edición que se alargará hasta el sábado en el Parc del Fòrum de Barcelona y que prevé acoger a 25.000 asistentes al día, que deberán realizarse test de antígenos diarios, pero podrán bailar sin distancia de seguridad y con mascarilla puesta.
El certamen llega en pleno repunte de casos de Covid-19, por lo que el Govern ha dado marcha atrás y ha aprobado medidas restrictivas para la celebración de eventos masivos al aire libre a partir de este mismo viernes.
CARTEL DEL FESTIVAL
Abrirán el festival Kase.O, Natos y Waor, Lágrimas de Sangre, Rayden, y el viernes 9 será el turno de Two Door Cinema Club, Amaral, Zoo, La Casa Azul, Manel, Sopa de Cabra, Carolina Durante y Novedades Carminha, entre otros.
En el tercer y último día del festival actuará, entre otros, Izal, Leiva, Morcheeba, Tom Walker, Dorian, Iseo & Dodosound, Coque Malla y León Benavente y, además, el viernes y el sábado tendrá lugar el ciclo de comedia Cruïlla Comedy, que hará subir al escenario a Ignatius Farray, Antonio Castelo, Eva Soriano, Iggy Rubín, Danny Boy, Inés Hernand, Marc Sarrats, Modgi y Tomàs Fuentes, entre otros humoristas y cómicos.
MEDIDAS DE SEGURIDAD
Los asistentes, incluyendo artistas, trabajadores y periodistas, deberán realizar un test de antígenos antes de acceder al recinto, y una vez realizado se entregará una mascarilla FFP2.
Tras obtener un resultado negativo en el test, los asistentes podrán disfrutar del festival sin limitación de movimientos ni distancia física. El coste del test de antígenos y el personal médico se repercutirá parcialmente en los asistentes: el precio será de 8,5 euros para un día de festival, 12 euros para dos y 15 euros para tres.
EL RETO DE LAS COLAS
El festival ha señalado que no podrán acceder al recinto las personas con un resultado positivo; que convivan con los asistentes que han obtenido un resultado positivo; personas que presenten una temperatura superior a 37 grados; con un diagnóstico de coronavirus las dos semanas previas, y personas que se encuentren en cuarentena.
El festival afronta el reto de conseguir que no se produzcan aglomeraciones a la entrada de los conciertos para realizarse los test.