El conseller de Salut de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ha dicho que no es partidario del uso del pasaporte Covid-19 para acreditar la pauta competa de vacunación porque es "una restricción de derechos y libertades".
Sin embargo, ha defendido su uso en algunas ocasiones, como para acceder a los locales de ocio nocturno, un sector muy castigado por la pandemia y "que tiene un cierto riesgo", según ha dicho en declaraciones a Catalunya Ràdio.
"VIRUS ESTACIONAL"
El titular de Salut, que confía en que el coronavirus "se vuelva un virus estacional" y que esta Navidad sea como las anteriores a la pandemia, ha explicado que el uso de la mascarilla aún se prolongará durante este otoño y principios de invierno.
A la pregunta de si el Govern impulsará estrategias concretas para las personas que no se quieren vacunar, ha recordado que unas 3.000 personas reciben cada día una primera dosis y se ha mostrado partidario de "buscar determinados colectivos donde es más difícil llegar, como las personas vulnerables".
MÁS INVERSIÓN EN SALUD
Para Argimon, sería "ingenuo" pensar que los Presupuestos de la Generalitat para 2022 pueden ser similares a los de 2020 o 2019, y ha pedido una mayor dotación para Salud para hacer frente al gasto derivado de la pandemia y para proteger la salud mental.
El conseller ha dicho que "aún falta tiempo" para determinar si la vacunación puede afectar a la fertilidad o puede provocar alteraciones en el ciclo menstrual.