El tráfico está colapsado este 19 de octubre en Barcelona. Las principales vías de entrada y salida de la capital catalana cifran retenciones kilométricas

La ronda Litoral es el eje circulatorio más afectado de todos. La B-10 tiene un carril cortado en Sant Adrià de Llobregat a causa de un accidente. Esto ha provocado colas de 1,5 kilómetros desde Bon Pastor. También de Sant Adrià de Llobregat al puerto, de Llobregat y de Zona Franca al puerto y de Guipúscoa al nudo del Besòs.

Retenciones de 1,5 kilómetros en la ronda Litoral de Barcelona / SCT



MÁS ACCIDENTES

En la C-58 también se ha producido un siniestro en Montcada, dirección Sabadell. Según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT), los vehículos implicados siguen en el arcén. Hay unos 4 kilómetros de colas desde el nudo de la Trinitat. También 5 kilómetros de retenciones a Sabadell y 6,5 kilómetros más entre Barberà y Barcelona sur. 

En la C-31 también hay un carril cortado en Sant Adrià de Besòs sentido Barcelona por un accidente. En este tramo hay un medio kilómetro de retenciones. La AP-7, la C-16, la B-23, la A-2 y la C-32 también presentan grandes niveles de colapso durante esta mañana. 

PRECAUCIÓN AL VOLANTE

El organismo de tráfico de la Generalitat de Cataluña ha alertado esta mañana de precaución al volante debido a los múltiples sucesos producidos en las carreteras barcelonesas.

El Servei Català de Trànsit ha pedido a los conductores que estén alerta durante las retenciones para que no se produzcan más accidentes. 

Retenciones en una autopista de Barcelona / EUROPA PRESS



COLAPSOS A DIARIO

Los colapsos en los accesos a Barcelona han recuperado casi los mismos niveles prepandémicos. También la liberación de los peajes ha redistribuido la movilidad y concentrado los atascos.

Con el transporte público aún sin recuperar el 30% de sus usuarios, los desplazamientos por carretera han vuelto desde septiembre a casi las mismas cifras de 2019, lo que ha provocado de nuevo embotellamientos diarios, incluso en puntos donde antes no se producían, en parte debido a la liberación de los peajes, que han sobrecargado las autopistas en los accesos a Barcelona.

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