En riesgo de cierre el negocio encargado de fabricar la estrella de la Sagrada Família que coronó la torre de la Virgen María del monumento barcelonés en diciembre. Se trata de la compañía Cricursa, con unos 300 trabajadores, que debería unos 60 millones de euros debido a la caída de la empresa durante la pandemia.
A pesar del riesgo inminente de liquidación, una empresa se ha interesado por las fábricas, tal y como ha informado el diario Segre. Esta podría ser la última oportunidad para evitar su cierre. Cricursa tiene actualmente talleres en las comarcas de la Noguera y del Vallès Oriental.
La nueva estrella de la Sagrada Família, que se iluminó el pasado 8 de diciembre / METRÓPOLI
PERSONAL EN ERTE
Los trabajadores de las fábricas de Cricursa están en ERTE y han hecho saber que la compañía les debe tres meses de sueldo. Esta semana, algunos de ellos se han manifestado delante de la planta de Sentiu de Sió. La Delegación de la Generalitat en Lleida ha convocado una reunión el próximo miércoles, 9 de febrero, para tratar la situación.
Sindicatos y ayuntamientos temen que la compra de la empresa no garantice el puesto de trabajo de los operarios.
ENCARGO EMBLEMÁTICO
La estrella de la Sagrada Família se ha construido según los modelos que se aprecian en las fotografías del taller de Gaudí: a partir de un núcleo central de doce caras pentagonales con una pirámide en cada una de ellas. Cada una de las puntas mide 2,90 metros y el peso total de la pieza es de 5,5 toneladas. El vidrio utilizado para su construcción es rugoso porque, de ser liso, por la noche no se podría distinguir su forma correctamente.
Actualmente, la torre de María llega a los 134 metros, y con la estrella de doce puntas ya alcanza los 138 metros. El soporte que aguanta la figura está cubierto con un trencadís o mosaico de gres cerámico blanco. La luz que desprende es blanca, ya que utilizar otros colores la convertiría en un "espectáculo", según informó el pasado mes de diciembre Jordi Faulí, el arquitecto director de la Sagrada Família.
1,5 MILLONES DE EUROS
La figura, que se empezó a construir en 2019, ha tenido un coste total de 1,5 millones de euros en materiales y pruebas de resistencia. La estrella se ha sometido a distintas temperaturas para simular diferentes fenómenos meteorológicos y otras adversidades a las que se puede enfrentar desde su colocación.
El sistema implementado cuenta con un sistema de medición de tensión eléctrica para que, en caso de sobrevoltaje, los Leds se desconecten automáticamente.