La llegada de la nueva borrasca traerá un frente frío de cara a este fin de semana en Barcelona. Las temperaturas bajarán y se esperan chubascos, según ha avanzado el servicio meteorológico Meteocat, en la madrugada del viernes al sábado.
Se trata de un episodio de precipitaciones que se alargarán desde primeras horas de la madrugada hasta mediodía y, combinado con las bajas temperaturas, podría dejar una sorpresa en forma de nieve para los barceloneses que tengan a la vista el Tibidabo.
Y es que el punto más alto de la sierra de Collserola también experimentará dichas lluvias. No obstante, por su altitud, es esperable que el descenso de los termómetros programado para este fin de semana sea todavía más abrupto en la zona de montaña.
La cota de nieve podría caer hasta los 500 metros de altitud en la noche que separa el sábado del domingo. Por tanto, de producirse esos chubascos, las temperaturas en la zona más alta de Barcelona con respecto al nivel del mar podrían transformar, efectivamente, la lluvia en nieve.
En este sentido, la cota máxima de nieve del pico barcelonés, es decir, la altitud mínima registrada a partir de la cual la lluvia puede transformarse en nieve, es de 510 metros. A su vez, la montaña registra una altura de 512 metros sobre el nivel del mar, por lo que, aun con su escaso margen, sí cabe la posibilidad de que se produzca esa solidificación de las precipitaciones.
Con todo, sí parece improbable que el tibidabo amanezca blanco el domingo por la mañana, algo para lo que las temperaturas deberían mantenerse en valores muy cercanos a los 0 grados durante el tiempo suficiente para permitir que la nive cuajara, no se derritiera al contacto con el suelo y se mantuviera hasta la salida del sol.