Buenas noticias para los amantes de la cultura en Barcelona. Los cines Texas, que cerraron sus puertas en 2020 por la crisis de la pandemia, reabren sus puertas: sus sesiones de cine independiente a tan solo tres euros podrían volver muy pronto.
La sala abrió en 2014 y se consolidó como un referente por su amplia oferta y sus atractivos precios. Cuando el espacio tuvo que cerrar sus puertas por el covid, se generó una oleada de movimientos vecinales para salvar los cines, pero no pudieron evitarlo.
ESPACIO DE EXHIBICIÓN
No obstante, después de dos años con la persiana bajada, los Texas regresan para convertirse en un espacio de exhibición y producción de artes escénicas.
Así lo ha avanzado L'independent de Gràcia, que ha especificado que los antiguos cines pasarán a llamarse Teatre Espai Texas.
SUBVENCIÓN
El espacio, ubicado en el número 205 de la calle de Bailén, ya ha iniciado las obras para arrancar el nuevo proyecto.
El plan cuenta con una subvención de 18.000€ del Ayuntamiento para hacer frente al pago del alquiler. Por el momento, la fecha de reapertura aún no se ha anunciado.
EN CATALÁN
El nuevo proyecto está liderado por Isona Passola, la presidenta del Ateneu Barcelonès y Ana Rosa Cisquella, actriz y productora ejecutiva de Dagoll Dagom.
Según han explicado, buscan fomentar proyectos inéditos en catalán de teatro, humor, podcasts o teatro infantil y familiar. Además, mantendrán su oferta cinematográfica con sus dos salas de cine.
POLÉMICA CON EL PROPIETARIO DE LA SALA
El pasado 2021 hubo una gran polémica en las salas por presuntas irregularidades laborales. De hecho cuatro de los cinco trabajadores llevaron a juicio al guionista Ventura Pons, propietario de la sala, por presuntas irregularidades laborales.
Los exempleados acusaron al propietario de cantidades atrasadas, impago de salarios y vulneración de los derechos laborales. Además, reclamaron la ausencia de finiquito y rescisión de contrato entre septiembre de 2019 y mediados de 2020.
ISONA PASSOLA
Isona Passola, una de las responsables del nuevo proyecto, está inmersa en una gran polémica en el Ateneu. La falta de organización de la entidad tras la parálisis que provocó la pandemia del covid, el conflicto con el director de la Biblioteca –que despidió– y su enfrentamiento con la Escuela de Escritura, llena de frentes a la directora.
La Escuela de Escritura ha sido un auténtico filón para el Ateneu en los últimos años. Ante unas afirmaciones de Passola en las que señalaba que la institución peligraba y que se había planteado “cerrarla”, los trabajadores de la escuela elaboraron un comunicado en el que rebaten la supuesta falta de solvencia y anunciaron la decisión de constituirse como comité de empresa.