Las obras de construcción de la Sagrada Família siguen su curso natural, ahora centradas en la finalización de las dos torres de los evangelistas Marcos y Juan. Si se cumple con el calendario establecido, está previsto que se inauguren este mismo año 2023. Mientras tanto, y de forma paralela, se están llevando a cabo las obras de restauración de las torres de la fachada de 'Nacimiento'. Se trata de la más antigua de todas y está reconocida como Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco.
ENNEGRECIDAS POR LA CONTAMINACIÓN
Se trata de unas torres muy antiguas que pronto cumplirán cien años. De ahí su deterioro actual. Fueron construidas a finales de los años veinte del siglo pasado. De hecho, Antoni Gaudí solo vio acabada una, la de san Bernabé, finalizada en 1925, un año antes de morir. Con casi un siglo de historia, el año pasado se decidió restaurarlas para mejorar la apariencia de la fachada de 'Nacimiento'. Las obras incluyen el claustro del Rosario y las cuatro torres, ennegrecidas después de cien años de contaminación.
En 2022 se empezó con la restauración de las torres de los apóstoles Judas Tadeo y Matías. Este año se ha continuado con las de Bernabé y Simón. La previsión es terminar las obras el próximo mes de octubre, antes de que finalice el año. De momento, según ha dado a conocer este jueves la misma Sagrada Familia vía redes sociales, ya se ha dado por acabada la restauración de la parte superior de las torres de los santos Judas Tadeo y Matías.
La mejoría de las torres se ha hecho visible después de retirar los andamios que cubrían esta parte de la Sagrada Família. Hace tan solo unos días se han podido ver los pináculos de nuevo y en perfectas condiciones, con los colores originales que se habían perdido con el paso del tiempo.