Ya ha llegado el verano, y con él, las vacaciones. Para muchos es esencial poder pasar sus días de desconexión en una buena playa para refrescarse y disfrutar de buenos momentos con amigos y familia. Playas largas, buena comunicación, chiringuitos para cuando nos entre hambre, instalaciones deportivas… Para esto no hace falta ir muy lejos de Barcelona. En la comarca del Maresme se encuentra uno de los pueblos más bonitos de la costa barcelonesa. Se trata de Arenys de Mar, un lugar que a 45 minutos de la capital catalana que arrasa por sus atractivas playas.
PLAYAS DE ENCANTO
La más conocida es la que lleva el propio nombre del pueblo: la playa de Arenys de Mar. Se trata de una zona de fácil acceso, ya que se puede llegar en coche, además de tener parking gratuito. Es una playa ideal para pasar el día en familia, con niños pequeños.
Otra de las playas más atractivas es la de La Musclera. Se trata de una playa limpia y bien cuidada que dispone de todos los servicios básicos. También, para aquellos que quieran sentirse más 'liberados', cuenta con una zona habilitada para practicar nudismo. Se puede acceder en coche. La playa dispone de un espacio de interés natural para preservar la vegetación del litoral. En él se pueden ver especies de todo tipo.
La playa de Les Roques d'en Lluc se encuentra en el entorno urbano. Es larga y amplia, pero no dispone de equipo de socorro, por lo que hay que extremar las precauciones, más si se van acompañado de niños.
QUÉ VER EN ARENYS DE MAR
Para después de un baño refrescante, Arenys de Mar es un pueblo muy bonito que vale la pena visitar. Entre los lugares con más encanto se encuentra la Iglesia de Santa María de Arenys, el mercado, la Antigua Destilería Casilay o los jardines Xifré. El pueblo conserva sus orígenes marineros del siglo XIV. Mientras caminas por sus calles te encontrarás con torreones de defensa en Llobet y en el carrer Ample.