La capital catalana arrancará el próximo curso escolar con cinco institutos públicos nuevos, que sumarán 22 centros educativos de este tipo en la ciudad, según ha informado en un comunicado este lunes el Ayuntamiento de Barcelona. Unas cifras que distan mucho de las registradas en 2017, cuando en la ciudad había tan solo dos escuelas.
Cinco institutos nuevos
De los cinco, cuatro de ellos son fruto del crecimiento de las escuelas Elisenda de Montcada, Mestre Morera, Ciutat Comtal y Ferrer i Guàrdia, en los barrios de Ciutat Meridiana, Torre Baró y Vallbona, al norte de la ciudad. El restante es consecuencia de la fusión de la escuela Molí de Finestrelles y el instituto Vapor del Fil, que pasarán a ser el Instituto Escuela Vapor i Molí.
Reducir las adscripciones
Este aumento tiene el objetivo de “fomentar la coherencia entre los proyectos pedagógicos de escuelas e institutos” y simplificar las adscripciones: un 99% de las escuelas de Barcelona disponen de entre dos y tres institutos adscritos.
Para garantizar una distribución equilibrada del alumnado en situación de vulnerabilidad, en esta preinscripción se han distribuido las plazas de reserva en función de las zonas limítrofes, para igualar las plazas en dos zonas educativas vecinas que tienen índice de vulnerabilidad dispar.