Barcelona ha vivido su primer fin de semana veraniego: este domingo, 14 de abril, las temperaturas en la capital catalana han alcanzado los 29,1 grados.
Una temperatura propia de los meses más calurosos del año que el Observatorio Fabra ha registrado en su pico más alto.
Desde 1914
Los meteorólogos aseguran que se trata de la temperatura más alta registrada en la ciudad en el mes de abril desde el 1914, que es el año desde el que hay datos disponibles.
En cuanto al año pasado en la misma fecha, Barcelona ha rebasado en 1,6 grados el récord.
El panorama cambiará
Sin embargo, no hay que confiarse. Los expertos han dejado claro que tras este episodio de calor excepcional, las vaguadas o flujos puntuales podrían hacer acto de presencia en Barcelona los próximos días. También las lluvias, que podrían aliviar el panorama en cuanto al apartado térmico.