A partir del miércoles, 7 de agosto, una nueva ola de calor extremo afectará a Barcelona. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la subida de temperaturas será gradual, alcanzando su pico máximo el fin de semana. Este fenómeno meteorológico llega apenas una semana después de que el Observatori Fabra registrara una temperatura histórica de 40 grados, la más alta jamás registrada en la ciudad.
Durante los primeros días de esta nueva ola de calor, las temperaturas mínimas se mantendrán alrededor de los 24 grados, mientras que las máximas llegarán a 32 grados. No obstante, se espera que el fin de semana las temperaturas superen los 35 grados.
A diferencia de los otros episodios de calor, el que está en camino será mucho más duradero. Aunque no se registrará un gran pico en las temperaturas, el calor y el bochorno podrían dilatarse durante una semana e incluso hasta el 15 de agosto.
Temperaturas muy elevadas en Barcelona
El Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) ha indicado que esta semana las temperaturas serán superiores a la media climática. La ausencia de lluvias, combinada con ligeras brisas de hasta 15 kilómetros por hora que traerán aire caliente, incrementará la sensación térmica, haciendo que las condiciones sean aún más insoportables.