El fútbol botones revive en Barcelona: un deporte olvidado que vuelve a las aulas

El ingenio perspicaz de una generación con recursos limitados dio origen al fútbol botones en los años 20 en Barcelona. La intención era recrear el fútbol en un tablero. Y se logró. Solo bastó una mesa de 1,80 metros de largo y 1,20 de ancho y equipos de 11 botones, que algunos embellecieron con dorsales y escudos. Los partidos duran media hora, pero la dificultad reside en la precisión casi quirúrgica que se requiere para lanzar los botones con los dedos.

"La emoción de marcar cada gol hizo crecer la afición", dice Enric Albadalejo, presidente de la Asociación Catalana de Fútbol Botones, con sede en Sant Gervasi. Albadalejo destaca que el juego alcanzó su máximo esplendor entre 2000 y 2007, aunque desde entonces el número de jugadores disminuyó.

En 2016, el Festival Dau, dedicado a los juegos de mesa y otras actividades lúdicas como el fútbol de botones, impulsó un breve resurgimiento. "Los tableros se llenaron con más de 2.500 asistentes en un fin de semana". Sin embargo, tras este repunte, el pasatiempo cayó nuevamente en decadencia, alcanzando su "punto más bajo en 2022".

Varios aficionados jugando a fútbol botones Cedida

Aumento de un 60% de socios

Sin embargo, en los últimos dos años, los socios de la asociación han aumentado un 60%. "Todo sin apoyo institucional", recalca Albadalejo, quien apunta al "resurgimiento" del juego, que ha empezado a introducirse en varios colegios de Barcelona.

Según el presidente del club, este revivir surgió después de que el Parlament de Catalunya reconociera este juego como un deporte en 2023. "Fue una alegría después de 30 años sin recibir apoyo institucional", expresa. "Ganamos autoestima deportiva y el número de aficionados aumentó cuando vieron que tenía proyección", añade.

Varios aficionados jugando a fútbol botones Cedida

Vuelta a las escuelas

Más allá de este reconocimiento y el aumento de socios, algunas escuelas decidieron, a su vez, introducirlo en las horas de patio y comedor. Albadalejo antes de ser presidente de la asociación, estaba subcontratado para el Ayuntamiento para organizar de actividades de ocio en la capital catalana y decidió hacerles esta propuesta a los colegios. 

"Quise promocionar el fútbol botones en las escuelas porque fue el espacio donde surgió en un inicio este pasatiempo", relata el aficionado. "Propuse a varios colegios instalar los tableros para que jugaran los niños y las directoras aceptaron sin pensarlo", añade. De este modo, logró introducir este juego en la Reina Violant, ubicada en Gràcia.

"Alrededor de 60 niños juegan cada día en el patio", atestigua, a la vez que afirma, que "muchos incluso tienen su propio equipo y otros montan su propia Liga". "Los niños tienen ganas y es una herramienta educativa", añade. Por este motivo, otros colegios como el Univers y Josep Maria Jujol se han sumado a la iniciativa. "Este último lo quería poner en la clase de educación física", asegura Albadalejo. 

Niños jugando a fútbol botones en la plaça del Diamant Cedida

Sección infantil formativa

Tras el aumento de esta afición en las escuelas, algunos estudiantes quisieron formarse para mejorar sus habilidades en fútbol botones, lo que llevó a Albadalejo a crear una sección infantil dentro de la asociación donde impartir formación de este deporte. 

"En 2023 inauguramos esta pequeña sección donde tenemos un total de 15 niñas y niños que son hijos/as o nietos/as de socios este club y alumnos de la escuela Reina Violant de Gràcia", explica el presidente. Un creciente interés que también demuestra la reactivación del Fútbol Botones en la capital catalana. 

Roger Paz, secció infantil Associació Catalana de futol botons (ACFB) Cedida

Las plazas, a rebosar de jugadores

Las plazas de Barcelona son espacios clave en el resurgir de esta afición. "Desde 2014 se instalan en varios distritos tableros para que puedan jugar a fútbol botones, y se ha demostrado que funcionan bien, ya que siempre se llenan", confirma Albadalejo.

Especialmente en verano, esta iniciativa tiene más éxito. "El periodo estival es el más favorable para los aficionados, pero en invierno el proyecto se detiene", explica el presidente. Este verano, uno de los lugares con más actividad ha sido la plaza del Diamant. "Los tableros se han llenado por completo", destaca el socio.

Aficionados jugando a fútbol botones en la plaza del Diamant Cedida

Impulso de mujeres

El creciente interés de las mujeres por este deporte es otro indicador del resurgimiento actual. "En el siglo XX, el fútbol era considerado exclusivamente masculino, lo que nos pasó factura y generó desinterés", comenta Albadalejo. Sin embargo, hoy en día, aunque las mujeres aún ocupan un rol minoritario, "los tableros en los colegios se llenan por igual de niñas y niños".

Según el aficionado, una de las ventajas del fútbol botones es que no exige esfuerzo físico, como una carrera de 100 metros, donde existen diferencias entre hombres y mujeres. "No habrá fútbol botones masculino y femenino, como ocurre en el fútbol tradicional", añade.

Aficionadas jugando a fútbol botones en la plaça del Diamant Cedida

Apoyo institucional

Pese a que Albadalejo celebra este reflorecimiento, enfatiza la importancia de asegurar su continuidad mediante el apoyo institucional. "Queremos que este deporte llegue a más colegios, que siga presente en las plazas y que se creen clubes especializados en la formación del Fútbol Botones".

Sin embargo, para poder llevar a cabo este proyecto de promoción, que no solo tienen en mente, sino que ya han redactado, necesitan la aprobación de una subvención para ejecutarlo. "Con el cambio de gobierno en la Generalitat, no hemos entrado en los presupuestos de este año para acceder a alguna subvención, pero esperamos obtenerla para 2025".