Barcelona guarda una joya arquitectónica que muy pocos conocen. Se trata de un edificio bautizado como Alhambra, situado en el barrio de Sant Gervasi. Su nombre proviene de la fascinante recreación en su interior de elementos del célebre monumento árabe de Granada.
En concreto, este tesoro construido en 1875 está situado en el número 5 de la calle Berlinès, junto a la ronda General Mitre.
Impresionante réplica
La leyenda cuenta que su creador, un alemán, estaba casado con una granadina. Para mitigar su añoranza, decidió recrear elementos de la Alhambra en su nuevo hogar. Así nació este espacio que invita a los visitantes a viajar en el tiempo.
Entre los encantos del Alhambra, destaca una impresionante réplica del patio de los leones. Los arcos y capiteles también rinden homenaje a la magnificencia de la arquitectura islámica. Cada detalle cuenta una historia de amor y conexión cultural.
Además, el uso de materiales traídos de Marruecos le otorga autenticidad. Esta obra maestra se ha convertido en un símbolo del cruce de culturas. En un mundo cada vez más global, el Alhambra de Sant Gervasi sigue siendo un puente entre dos ciudades icónicas. El inmueble es del maestro de obras Domènec Batet.
Edificio que recrea a la "Alhambra"
Octava maravilla del mundo
La Alhambra es un monumento que brilla con luz propia. Su historia se remonta al siglo XIII, cuando fue construida bajo la dinastía nazarí. Originalmente concebida como una fortaleza, se transformó en un palacio real que encarna la grandeza del arte islámico.
La arquitectura de la Alhambra es única. Fusiona estilos con maestría y presenta intrincados mosaicos y yeserías que reflejan un ingenio excepcional. Sus arcos de herradura y patios serenos crean un espacio mágico.
En 1984, la UNESCO reconoció su valor cultural al declarar la Alhambra Patrimonio de la Humanidad. Asimismo, se considera la octava maravilla del mundo debido a su belleza incomparable y su valor histórico.