‘La balada del vórtice', la novela que reivindica la diferencia
El debut de Laia G. Rivas mezcla ciencia ficción y fantasía con tintes oníricos
“Con esta historia rompo una lanza a favor de los artistas y pretendo inspirar a los lectores para que no renuncien a su vocación, aunque la sociedad les empuje a rendirse a lo convencional”, argumenta la autora, condensando el esperanzador mensaje que contiene la primera parte de la trilogía. Y sabe bien de lo que habla pues, pese a que lo que cuenta pertenezca al ámbito de la ficción, ha plasmado matices de sus vivencias en cada capítulo.
El libro narra como Britt, una joven aspirante a escritora, lidia con la frustración que supone perseguir un sueño irrealizable. Además de enfrentarse a un futuro incierto, la chica oculta un secreto que nadie sabe: desde que era niña, en ocasiones un halo de luz azul se manifiesta ante ella, cuya presencia no le causa temor sino una intensa curiosidad. Cuando el fenómeno parece haber desaparecido, la luz regresa sin previo aviso para guiarla a la parte de atrás de la pantalla del Suspiria, el cine independiente donde trabaja. Allí conoce a Dalan, un rebelde historiador que se esfuerza en superar una importante pérdida personal a la vez que lidera Deranged Cabaret, un grupo de glam-rock que reúne a una sólida base de seguidores en un local llamado Collapse Club. La noche de Halloween, al aplicar el cambio de hora que dicta que a las tres deberán retrocederse los relojes hasta las dos, Britt sufre una especie de desmayo dentro de un túnel escondido entre los muros del Suspiria. A partir de entonces empiezan a producirse alteraciones en su entorno a las que no consigue dar explicación. A medida que los encuentros con Dalan se vuelven más habituales, ambos descubren que les une un vínculo psicológico que será clave para resolver ese inquietante misterio.
La pareja, acompañada de sus íntimos amigos, aborda cuestiones tan relevantes como el sentido de la existencia, la amistad, el amor, la inclusión, el idealismo, la mortalidad o el duelo. Los hechos nos muestran el modo en que sus experiencias les ayudan a desenmascarar la verdad referente a un mundo que alberga oleadas de conocimiento que el ser humano jamás imaginaría. Ciencia ficción y fantasía confluyen en una obra que actúa como una puerta abierta a lo maravillosamente sobrenatural, exponiendo situaciones certeras con las que la gente puede identificarse y empatizar con unos personajes que no se asustan ante lo inusual y que priorizan aquello que les apasiona.
Guionista, redactora cultural y ahora escritora, Laia G. Rivas (Barcelona, 1992) apuesta por la originalidad, aunque esté ligada a la incomprensión. Su reivindicación sobre la autenticidad surgió tras vencer un largo bloqueo creativo, impulsada por su admiración hacia la figura de Jonathan Larson, lo cual la llevó a dar el paso de autopublicar su novela debut. Sus escritos van dirigidos a “los distintos, los inconformistas, los extraños”, personas sin prejuicios y con inquietudes que se corresponden a las de los personajes que creó. Su principal objetivo es transmitir la idea de que nuestras aspiraciones son realizables siempre que no dejemos de intentarlo.
La Balada del Vórtice se pone a la venta el jueves 28 de noviembre. Si quieres hacerte con un ejemplar firmado puedes adquirirlo contactando con la autora a través de Instagram. La obra está disponible también en Amazon, tanto en papel como en digital, accediendo al perfil de Laia G. Rivas.
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