El público se rebela contra el Gran Teatre del Liceu de Barcelona. El emblemático auditorio barcelonés ha sido objeto de duras críticas tras las quejas de los asistentes por la mala calidad de los conciertos celebrados durante las recientes festividades navideñas.
En particular, se ha señalado a la productora NK Prodarte, responsable de organizar los recitales, y a su orquesta, la Hollywood Symphony Orchestra, acusada de ofrecer una ejecución deficiente y de generar una experiencia que ha dejado un público insatisfecho.
Mala calidad artística y acústica
Los conciertos, que tuvieron lugar en varias fechas clave del calendario navideño, han sido fuertemente criticados por la mala acústica de la sala y la baja calidad de la interpretación.
En particular, muchos asistentes se han quejado de que la música se escuchaba demasiado baja, lo que afectó la experiencia auditiva en una sala de la magnitud del Liceu.
Otros han señalado la presencia de músicos sin partituras, que generó desorganización y contribuyó a una percepción de falta de profesionalismo.
Confusión por la programación externa del Liceu
Otro de los puntos que ha generado críticas es la confusión en torno a la relación entre estos conciertos y la programación oficial del Liceu. Los eventos fueron promovidos bajo el nombre del Gran Teatre del Liceu, lo que llevó a muchos a creer que formaban parte de su calendario artístico regular. Sin embargo, el Liceu ha aclarado que estos conciertos fueron organizados por NK Prodarte, una productora privada que alquiló el teatro para la ocasión.
El hecho de que estos eventos aparecieran bajo el mismo paraguas de la programación del Liceu generó confusión entre el público, que se sintió engañado al asistir a lo que pensaban que eran conciertos de alta calidad, solo para encontrarse con una experiencia bastante diferente.
Los músicos también se quejan
Además de las quejas del público, también han surgido denuncias por parte de los propios músicos de la Hollywood Symphony Orchestra, quienes han manifestado en redes sociales y entrevistas que las condiciones laborales eran precarias.
Algunos músicos han señalado que, en al menos una ocasión, un recital fue cancelado debido a la falta de partituras para todos los músicos, lo que agravó aún más la falta de preparación en la formación.
El Liceu asume la responsabilidad
Ante el torrente de críticas, el Liceu ha expresado su lamentación por no haber alcanzado los "estándares mínimos de calidad" que esperan tanto el público como la institución.
En un comunicado, el teatro ha asegurado que, aunque la responsabilidad artística de los conciertos recae en NK Prodarte, revisarán los procedimientos para garantizar que futuros eventos externos no afecten la calidad de su programación.
Valentí Oviedo, director del Liceu, ha declarado que, en los próximos días, se realizará un análisis detallado de lo sucedido. Además, confirmó que las fechas navideñas de 2025 ya están ocupadas por otros proyectos artísticos, por lo que se espera que este tipo de incidentes no se repita en el futuro.
NK Prodarte y su relación con el Liceu
La productora NK Prodarte, responsable de los conciertos criticados, es una empresa habitual en el sector que organiza eventos en distintos espacios de Barcelona.
Aunque su relación con el Liceu se remonta a 20 años de colaboración sin incidentes, la calidad de los conciertos organizados este año ha puesto en duda la efectividad del control que el teatro ejerce sobre los eventos de promotores externos.
La empresa, que también programa conciertos en otros espacios de la ciudad, ha optado por no emitir comentarios públicos sobre las quejas recibidas. No obstante, su próxima actuación será el 11 de enero en el Auditorio de Barcelona, lo que deja entrever que, a pesar de las críticas, su actividad en la ciudad sigue en marcha.