
El futuro Teatre Arnau / AYUNTAMIENTO DE BARCELONA
Barcelona inicia la rehabilitación del Teatre Arnau con un proyecto de más de 10 millones
La intervención busca adaptar el edificio a las necesidades actuales, manteniendo su esencia histórica y su carácter de teatro popular
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El Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha este lunes las obras de rehabilitación del histórico Teatre Arnau, ubicado en la avenida Paral·lel, con el objetivo de preservar su patrimonio arquitectónico y devolverle su papel como espacio cultural de referencia en la ciudad.
Una inversión de más de 10 millones
El proyecto, impulsado por el Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB), cuenta con una inversión total de 10.174.841 euros y prevé finalizar las obras a mediados del año 2027.

La fachada del Teatre Arnau, con un andamio / METRÓPOLI - JORDI SUBIRANA
La intervención busca adaptar el edificio a las necesidades actuales manteniendo su esencia histórica y su carácter de teatro popular.
Un espacio para la memoria, la comunidad y las artes escénicas
El nuevo Teatre Arnau estará articulado en torno a tres ejes fundamentales:
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Memoria histórica, para preservar su legado como último teatro de barraca que queda en Catalunya.
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Comunidad y territorio, fomentando la participación de los barrios vecinos como el Raval, Poble-sec y Sant Antoni.
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Artes escénicas, con una programación abierta y diversa que recoja tanto manifestaciones tradicionales como propuestas contemporáneas.
Recuperación patrimonial y compromiso vecinal
Se conservarán elementos emblemáticos como la fachada original y la estructura de madera, manteniendo la identidad arquitectónica del edificio.

Render del Teatre Arnau de Barcelona
El proyecto también pone énfasis en el trabajo comunitario, invitando a entidades locales, profesionales del sector cultural y vecindario a implicarse activamente en el renacimiento del teatro.
Un teatro con más de un siglo de historia
Inaugurado en 1894, el Teatre Arnau es considerado un símbolo de la cultura popular barcelonesa. Fue adquirido por el Ayuntamiento en 2011 tras años de cierre, y su futuro fue definido a través de un proceso participativo con vecinos y colectivos locales.
La actual rehabilitación quiere convertirlo en un centro cultural de proximidad, vivo y con vocación transformadora para el entorno.