El Port de Barcelona ha adjudicado este miércoles, 28 de mayo, las obras para construir los tres muelles de la nueva terminal de ferries, un proyecto presupuestado en 54,7 millones de euros y con un plazo de ejecución de algo más de cuatro años (51 meses).
Según ha informado la autoridad portuaria en un comunicado, las obras estarán a cargo de las empresas SATO y Rubau, y se desarrollarán en el Moll Adossat, la zona que concentrará a partir de ahora la mayor parte del tráfico de pasajeros en la capital catalana.
El proyecto contempla la construcción de un muelle de 12 metros de calado y dos muelles adicionales de 8,5 metros, además de las infraestructuras necesarias como los fundamentos, muros, superestructura y equipos portuarios.
Traslado de la actividad
La iniciativa forma parte del proceso de reorganización y traslado de la actividad portuaria pactado con el Ayuntamiento de Barcelona en 2018, que busca alejar las terminales de pasajeros del centro urbano.
Imagen de archivo de un ferry que une Barcelona e Ibiza / ARCHIVO
Con la entrada en funcionamiento de esta terminal, el Moll Adossat se convertirá en el epicentro del tráfico marítimo de ferries y barcos ro-ro pax, es decir, embarcaciones que transportan pasajeros y vehículos mediante rampas para carga y descarga.
El presidente del Port de Barcelona, José Alberto Carbonell, ha destacado la importancia estratégica de esta obra: “La futura terminal para barcos ro-ro pax en el muelle Adossat nos permitirá seguir mejorando la operativa de esta tipología de tráficos".
Un barco atracado en el Puerto de Barcelona
Cierre de la terminal de cruceros
En los últimos años ya se ha avanzado en este proceso: tras el cierre de la terminal de cruceros del muelle Barcelona Nord y de la de Baleària en el muelle Drassanes, la terminal de Barcelona Sud cesará su actividad en 2026, consolidando así el Moll Adossat como único punto de salida y llegada para estos tráficos.
Además, el proyecto adjudicado incluye la construcción de la superestructura que permitirá conectar los nuevos muelles con los ya existentes tras la última ampliación del Adossat, asegurando así la continuidad operativa de toda la infraestructura.