No son las imágenes típicas que en esta época del año se pueden ver en los Sanfermines, con personas que después de disfrutar de la fiesta caen rendidos en cualquier rincón de Pamplona. Son imágenes que se ven a diario en las calles del barrio del Raval de Barcelona y que con la llegada del verano y el aumento del número de visitantes a la ciudad se hacen más habituales.
Son personas que duermen en la calle, en cualquier rincón, sin, aparentemente, importarles si lo hacen rodeados de suciedad o basura. Suelen ser personas que, presuntamente, se encuentran bajo los efectos de las drogas o el alcohol y que no tienen fuerzas ni ganas para buscar un lugar más adecuado en el que descansar.
Los vecinos del Raval están hartos de tener que convivir con estas imágenes día tras día, sin que exista la percepción en el barrio de que las administraciones hagan lo suficiente para evitar que se continúen produciendo.
TURISTAS
La llegada del verano provoca, además, un sensible aumento de este tipo de escenas, sobre todo por la presencia del fenómeno conocido como el turismo de drogadicción, un aumento de los extranjeros que vienen a la ciudad atraídos por la facilidad que encuentran a la hora de conseguir dosis de estupefacientes a buen precio.
Las denuncias que los vecinos han venido haciendo en los últimos meses para intentar frenar este fenómeno no han sido suficientes y tienen que ver este tipo de imágenes cuando salen de sus casas para ir a trabajar, a hacer la compra o simplemente acompañar a sus hijos al colegio, a las colonias de verano o a pasar un rato en el parque.
Las fotografias que se muestran han sido tomadas por los propios vecinos en algunas de las calles del Raval en las que la presencia de los narcopisos ha sido constante en los últimos tiempos y en las que este tipo de escenas son, por desgracia, muu habituales.