El Ayuntamiento de Barcelona quiere poner remedio a la degradada situación que vive el distrito de Ciutat Vella y acaba de realizar un encargo de alquiler de cabinas sanitarias portátiles y urinarios de pie que costarán al erario público nada menos que 253.897 euros. Este equipamiento se ha hecho necesario para “minimizar la incidencia de deposiciones de orinas en Ciutat Vella, donde hay una fuerte incidencia de los malos olores por este problema, agravado por la casuística de casco antiguo con calles estrechas, con rincones y poca ventilación”, según detalla el informe de necesidad firmado por los técnicos municipales.
MEDIDAS "INSUFICIENTES"
Este informe señala, asimismo, que “las medidas que realizan actualmente los servicios de limpieza para paliar el problema, que se agrava en la temporada de verano, es la de aumentar la frecuencia de riego y utilizar desinfectantes en los puntos más conflictivos”. Debido a que estas medidas son insuficientes y representan un alto coste para el consistorio barcelonés, los responsables municipales resolvieron la contratación de urinarios portátiles.
Además de los problemas cotidianos del distrito –con una masificación considerable y un elevado grado de incivismo– la situación de Ciutat Vella se agravó en los últimos meses con la crisis sanitaria: al cierre de varios pisos patera y narcopisos se le sumó la formación de grandes colas de ciudadanos con poco nivel adquisitiva que hacen largas colas para recibir alimentos en los puntos de avituallamiento previstos por la Administración o por entidades cívicas, que reparten alimentos gratuitamente. Ello ha provocado aglomeraciones, más masificación y degradación en algunas zonas, circunstancias que han puesto en alerta a las entidades vecinales. De hecho, la mayoría de las quejas en las últimas semanas se refieren tanto al consumo de droga en la vía pública como a las conductas de deposiciones en las calles.
TRES TIPOS DE CABINAS
Para dar una solución prolongada en el tiempo, los técnicos propusieron que el contrato dure 19 meses y que se pueda prorrogar por otros 12 meses hasta que se vuelva a convocar otro concurso si persisten las mismas condiciones. El contrato se lo llevó la compañía Toi toi sanitarios móviles, que tradicionalmente ya es proveedora de este tipo de aparatos y servicios (en el contrato se incluye el alquiler, instalación, limpieza y mantenimiento de los urinarios).
Las cabinas han de ser de tres tipos: las normales, de 1,06 x 1,06 metros y con una altura de 2,3 metros, con un depósito mínimo de 240 litros, pavimento liso antideslizante, dispensador de papel higiénico, limpiamanos con dispensador líquido higienizante y producto químico biodegradable, aseptizante y sin formaldehido. Estos equipamientos son comunes a todas las cabinas.
PARA PERSONAS CON MOVILIDAD REDUCIDA
La segunda clase son las cabinas PMR, para personas con movilidad reducida. Estad cabinas han de tener unas medidas de 3 por 2 metros como mínimo y una altura máxima de 3 metros. Las dimensiones mínimas serán de 1,65 x 1,65 metros. En la cabina ha de haber también un espacio para giro de metro y medio. La altura del asiento del lavabo ha de ser entre 40 y 45 centímetros, con barra lateral abatible. La puerta ha de abrirse hacia afuera y dejar un espacio mínimo de paso de 80 centímetros. El acceso ha de ser a cota cero (o sea, a ras de suelo) y el depósito de agua ha de tener, como mínimo, 130 litros.
El tercer elemento a instalar con los urinarios de pie, que son cabinas de 1,1 x 1,1 metros y una altura máxima de 1,5 metros. Estos urinarios pueden ser utilizados por hasta 4 personas simultáneamente y disponen de un depósito con capacidad para 400 litros. Además de utilizar producto químico biodegradable, han de tener un sistema de sifón para evitar los malos olores. Los urinarios han de limpiarse tres veces al día de lunes a jueves, pero de viernes a domingo se han de realizar cuatro limpiezas.
MEDIDAS EN TMB
Al concurso se presentaron tres empresas cuyas ofertas eran muy similares, pero se hizo con la adjudicación Toi Toi Sanitarios Móviles SL por haber propuesto una oferta económica con una baja del 35% sobre los precios unitarios. Las otras ofertas presentaron unas rebajas del 26,5% y del 31,5%. Por tanto, la mesa de contratación resolvió que ésta era la oferta con la mejor relación de calidad-precio. El contrato se otorgó el pasado 2 de julio.
Esta compañía ya se había hecho el mes pasado con un pequeño contrato para mitigar los efectos del Covid-19 en los transportes de la ciudad de Barcelona, y su área metropolitana siguiendo las recomendaciones del departamento de Salud para evitar la expansión del coronavirus. Según un informe de urgencia fechado el pasado 11 de marzo y firmado por el director de la red de Metro y bus, Ramon Bacardí, el expediente se realizaba para “poder cubrir las posibles necesidades de servicio en los diferentes centros de TMB”. La prioridad, añadía, “es garantizar la seguridad de los trabajadores y sus familias, así como de los usuarios y personal de empresas externas. Por este motivo, se reforzarán las medidas higiénicas de vehículos e instalaciones”. El contrato, que tiene una dotación de 4 millones de euros para prever cualquier contingencia, fue sacado a concurso por Transports de Barcelona y dividido en 64 lotes. El que se llevó Toi toi ascendía a 16.335 euros.