La instalación, arrendamiento y mantenimiento de 11 cabinas que funcionarán como lavabos públicos -automáticos y autolavables- en las calles de Ciutat Vella puede llegar a costar hasta 1.158.864,43 euros, IVA incluido. Ése es el importe de la licitación que el Ayuntamiento de Barcelona ha publicado en la página de transparencia de la Generalitat [ver aquí].
Los nuevos váteres se instalarán en la plaza de Terenci Moix, la plaza de Anna Murià, el Pla de Palau, la plaza de Sant Agustí, la plaza de Salvador Seguí, el paseo Marítim, la plaza del Duc de Medinaceli, los jardines de Sant Pau del Camp, el paseo de Picasso, la Rambla del Raval y la plaza de la Catedral. En los citados emplazamientos ya existen unos servicios similiares, que serán sustituidos.
HASTA CUATRO AÑOS
El contrato es por dos años, ampliable a otros dos. El valor estimado total es de 1.927.675,20, IVA incluido. La presentación de ofertas está vigente hasta el 24 de diciembre, indica la convocatoria pública, que depende del distrito de Ciutat Vella, que comanda el concejal Jordi Rabassa de Barcelona en Comú.
Los lavabos tendrán unas dimensiones máximas de tres metros por dos y un espacio interior de movilidad de 1,5 metros. Dispondrán, además, de un depósito de agua con 130 litros como mínimo, lavamanos con gel y dispensador de papel higiénico, y deberán ser accesible para personas con movilidad reducida. Los servicios tendrán que ser limpiados tres veces al día.
LAS CABINAS SE AMPLÍAN POR LA CAMPAÑA DE VERANO
Actualmente, en las calles de Ciutat Vella hay una docena de cabinas autolavables -a las citadas hay que sumar otra de encastada en la plaza de Folch i Torres- y otros dos lavabos en locales fijos en la plaza de los Àngels y en el subsuelo del monumento a Serafí Pitarra, en la parte baja de la Rambla. Todos estos váteres funcionan de forma permanente.
Otros cinco servicios -en la plaza del Poeta Boscà, la plaza de Charles Darwin, la plaza de la Gardunya, el paseo del Born y los jardines de Sant Pau del Camp- se retirarán el 31 de diciembre. "Eran de la campaña de verano", apuntan fuentes municipales. Muy posiblemente, en 2021 se volverán a instalar en los citados lugares o en otros.
En 2018, el Ayuntamiento amplió el número de lavabos en las vías y plazas de Ciutat Vella, el distrito con una mayor presión de visitantes. Buena parte de los usuarios de estas instalaciones son personas sin techo, noctámbulos y turistas (al menos hasta la llegada de la pandemia). En 2017, estos urinarios acumularon 539.456 usos.