Seat contratará a 400 temporales para producir el nuevo Ibiza
El fabricante automovilístico prevé mantener los operarios al menos hasta final de año
20 abril, 2017 16:23Noticias relacionadas
El lanzamiento del nuevo Ibiza, previsto para junio, llevará a Seat a contratar en las próximas semanas a unos 400 trabajadores temporales para cubrir las necesidades de producción, que se sumarán al centenar que ya se han incorporado en el último mes. El presidente del comité de empresa de Seat, Matías Carnero, ha explicado que estos 500 trabajadores, que procederán de ETT (Empresas de Trabajo Temporal), irán a reforzar tanto la línea 1, en la que se fabrica el Ibiza; como la 2, que produce el León, y la 3, en la que en estos momentos se ensambla el Audi Q3.
Según las previsiones de la compañía automovilística, acordadas con los sindicatos, estos 500 nuevos operarios trabajarán en la fábrica de Martorell (Barcelona) hasta finales de año y su continuación más allá de esas fechas estará condicionada a los planes de trabajo para la línea del Q3 durante el 2018. En este sentido, Carnero ha apuntado que el fin de la producción del Q3, prevista para el último semestre de 2018, irá liberando mano de obra de plantilla de la línea 3 de manera progresiva, por lo que éstos se irían incorporando a la línea 1 y ya no serían necesarios todo los temporales contratados.
PLANES DE FUTURO
La cifra de los nuevos temporales que podrían continuar en las líneas de montaje dependerá también de las necesidades de producción del Audi A1, que sustituirá al Q3 y que, en principio, son menores. Además del lanzamiento del nuevo Ibiza, la línea 1 concentrará la producción en los próximos meses del Arona, el nuevo SUV de pequeñas dimensiones que tendrá Seat y que se lanzará probablemente después del verano.
Seat ha invertido 900 millones de euros en el desarrollo y el lanzamiento de la quinta generación del Ibiza y del Arona, la cifra más alta que la firma ha destinado a nuevos modelos y superior en cien millones a la que se inyectó para el León. El nuevo Ibiza, desarrollado íntegramente en Barcelona, convivirá en la línea de producción durante unos meses con la cuarta generación del modelo, que tiene pedidos que atender, sobre todo, internacionales.