Los cochecitos Jané aceleran y tropiezan
El fabricante de equipos para bebés lanzó una marca de motos de trial que está resultando ser un pozo de pérdidas
18 mayo, 2021 00:00Noticias relacionadas
Zapatero a tus zapatos. El viejo dicho se puede aplicar punto por punto a la veterana compañía catalana Jané, dedicada desde 1932 a la manufactura de cochecitos, sillas y otros artículos para bebés.
Durante ochenta años centró sus esfuerzos en ese negocio medular. En la década de los cincuenta del siglo pasado alcanzó el liderazgo nacional de su ramo. Hoy todavía lo mantiene contra viento y marea.
MOTOS VERTIGO
En este largo periodo, Jané amasó copiosos beneficios, que le han permitido acumular unos fondos propios de 82 millones de euros, pero en 2012 dio un paso en falso. Decidió diversificar sus actividades y con tal finalidad abordó el montaje de motocicletas de trial, con la marca Vertigo Motors.
Semejante iniciativa está resultando un fiasco. Jané ha invertido en ella 12 millones de euros, de los que ya ha perdido cerca de 8.
ERTE POR LA PANDEMIA
El grupo Jané se instrumenta por medio de una sociedad matriz titulada Business Attitude. Ésta tiene un solo dueño, que es su administrador Manuel Jané Santamaría.
El conglomerado cuenta con una gran planta de cochecitos y artículos de puericultura en Palau de Plegamans. La plantilla comprende 180 personas. El año pasado, 109 de ellas entraron en expedientes de regulación temporal debido a las restricciones del coronavirus.
El giro consolidado ascendió a 53,7 millones en 2019, último balance publicado. El 52% de las ventas procede de España y el 48%, de la exportación.
Año | Ventas | Resultado |
2019 | 53,7 | -4,4 |
2018 | 52,9 | -1,3 |
2017 | 69 | -2,3 |
2016 | 46 | -2,8 |
2015 | 73 | -1 |
2014 | 73 | 4,4 |
2013 | 77 | 3,8 |
La cuenta de pérdidas y ganancias se saldó con un incremento del resultado deficitario, que se encaramó de 1,3 a 4,4 millones de euros. Un tercio de los números rojos son imputables a las motos Vertigo; los dos tercios restantes proceden de Jané. Cabe destacar que el entramado carece de deudas bancarias.
SECTOR DECLINANTE
Jané dispone de filiales propias en Alemania e Irlanda. Desde hace varias décadas pelea por abrirse paso en los mercados exteriores, en particular los de Europa del este. En España, la persistente caída de la natalidad provoca que las industrias relacionadas con la puericultura tiendan a contraerse sin cesar.
La empresa nació en 1932 por iniciativa de Manuel Jané, cerrajero que disponía de un taller de forja en el pueblo de Sant Andreu de Palomar, hoy un barrio de Barcelona. Ese mismo año, tras nacer su hijo, diseña una silla con ruedas que facilita a su esposa el vehículo idóneo para pasear cómodamente al bebé.
INTENTO BURSÁTIL
La eclosión definitiva de la marca se verifica en los años cincuenta. Manuel logra que su cochecito se exponga en el escaparate de los almacenes Jorba, en Portal de l’Àngel, los más relevantes de Barcelona en aquel momento. Hoy el inmueble está ocupado por El Corte Inglés.
En 1990, aprovechando la situación de dominio que el emblema Jané lucía en España, la familia propietaria preparó la salida a bolsa. Pretendía vender una parte minoritaria del capital y retener el control. Pero las perspectivas de la lonja de valores eran poco favorables y obligaron a posponer el estreno. De aquella operación nunca más se volvió a hablar.