Un primer paso para que se acelere toda la inversión en la transición energética que necesita la ciudad de Barcelona. Es lo que pretende Miguel Rodríguez, comisionado de la Agenda 2030 del Ayuntamiento, que ha anunciado una inversión de 50 millones de euros, por parte del consistorio, a la que se deberá sumar la colaboración del sector privado para alcanzar un total de 166 millones de euros. El objetivo es colocar placas fotovoltaicas en los tejados de las casas e industrias de la ciudad, aunque se asume la dificultad de que las comunidades de propietarios apuesten por la iniciativa.

Rodríguez ha señalado que se ha puesto en marcha un plan que el consistorio ya había dibujado, con el convencimiento de que “sin la colaboración público-privada será imposible”. Adscrito a la concejalía que dirige la socialista Laia Bonet, responsable de la Agenda 2030, Rodríguez ha detallado el proyecto en unas jornadas dedicadas a la transformación energética en el sector industrial organizadas por el Consorci de la Zona Franca.

COMUNIDADES DE PROPIETARIOS

El Ayuntamiento colabora, por tanto, con un 30% de la inversión, y las compañías privadas del sector con el 70% restante. Se trata del mecanismo MESBarcelona, (Energía Sostenible de Barcelona), que permitirá la instalación gratuita de placas fotovoltaicas en los edificios de la ciudad. “En ciudades como Sant Cugat, el 35% de los tejados tienen fotovoltaica, aunque se trata de una ciudad con un enorme parque de casas unifamiliares”, ha precisado Rodríguez, para señalar que el problema en Barcelona será el de acordar, en el seno de las comunidades de propietarios, un proyecto de esas características.

Miguel Rodríguez (tercero por la izquierda), Comisionado de la Agenda 2030 / MA

En el proyecto del Ayuntamiento los inversores asumirán el 100% de la inversión, que podrán recuperar gracias a la energía excedente o los ahorros energéticos generados por las operaciones financiadas. Rodríguez ha considerado que la iniciativa “también está abierta para la industria, para las pymes de la ciudad”.

COLABORACIÓN PÚBLICO-PRIVADA

La energía que se puede lograr a partir de las placas fotovoltaicas en los tejados no se acaba de valorar, según las empresas especializadas. Carlota Pi, cofundadora de la compañía Holaluz, recuerda que hay diez millones de tejados en España, de los que ocho pertenecen a casas unifamiliares o pareadas y los otros dos millones a edificios multivivienda. La factura de la luz puede reducirse en un 60%.

El consistorio que dirige Ada Colau ha recibido numerosas críticas, --muy severas por parte de la patronal Foment—por no confiar en la colaboración público-privada. Rodríguez, sin embargo, --que ha participado en una mesa de debate junto a representantes de empresas como Basf, 0-I, o AzkoNobel—es un defensor total de esa colaboración. Antes de llegar al consistorio, en la Agenda 2030, Miguel Rodríguez ha ejercido como director de los centros de investigación público-privada en la escuela de negocios Iese.

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