Wallapop pierde 77 millones desde su fundación

La empresa barcelonesa Wallapop Spain no espera obtener sus primeros beneficios hasta 2024, como muy pronto. Así lo explica la compañía en sus cuentas del pasado año, que se saldaron otra vez con abultados números rojos. Los resultados arrojan un déficit de 23 millones, el triple que el ejercicio anterior.

PIONEROS

Los ingresos ascendieron un 71% y pasaron de 28 a 48 millones. Wallapop se fundó en 2013 por iniciativa de los emprendedores Gerard Olivé, Miguel Vicente y Agustín Gómez Martínez. Su objetivo reposaba en conectar a las personas que pretenden vender artículos en desuso.

EXPECTATIVAS

Así, se daba vida nueva a unos productos que con frecuencia acaban en el altillo del domicilio o en el cubo de la basura. Como todas las empresas digitales de reciente creación, los inicios fueron muy duros.

MARKETING

Los gestores lanzaron campañas de publicidad a destajo hasta que la aplicación se extendió entre los usuarios. Al día de hoy, quince millones de consumidores han entrado alguna vez para cerrar una compraventa.

Wallapop ha financiado sus actividades mediante rondas de captación de inversores. Estas fructificaron en sucesivas ampliaciones de capital realizadas con primas de emisión cada vez más altas.

TASACIÓN

Desde que se constituyó Grupo Wallapop, se ha llevado a cabo una decena de operaciones de este estilo. La última de ellas, acometida el año pasado, significó la entrada en caja de 157 millones.

Un usuario de Wallapop usando la plataforma / WALLAPOP

CORPORACIÓN

El precio pagado por el nuevo socio valora el 100% de la compañía en cerca de 700 millones. Wallapop Spain es filial al 100% de la sociedad Wallapop, la holding del consorcio. Una y otra tienen fijado el cuartel general en la barcelonesa avenida Meridiana, en el edificio que ilustra la información. Ahora andan en trámites de fusión, con el propósito de reducir gastos de estructura.

CAMBIO DE MANDO

Cuatro años atrás, el terceto de pioneros propinó un pelotazo, cedió sus acciones y se retiró de la gestión. Los fondos de inversión que controlan el capital acordaron nombrar presidente ejecutivo a Robert Scott Cassedy, quien desde entonces es el jefe máximo de la compañía.