Los perros que quieran chapotear en la orilla o jugar en la arena están de enhorabuena. Por segundo año consecutivo, el Ayuntamiento de Barcelona ha habilitado un espacio separado en la playa de Llevant para que los bañistas puedan acudir con sus mascotas. Tras la prueba piloto del verano pasado, el proyecto se ha consolidado e incorpora algunas mejoras que propusieron tanto ciudadanos como los equipos técnicos del consistorio.
El año anterior más de 13.000 perros acudieron a la playa sin que hubiera incidentes remarcables, según el balance hecho por el consistorio. El espacio estará abierto del 1 de junio al 25 de septiembre y tendrá un aforo limitado a 100 perros, que además deberán estar debidamente identificados por motivos de seguridad.
ACCESO CONTROLADO
Un servicio de información de dos personas que estará activo los siete días de la semana (lunes a viernes de 9:00 a 19:00 y fines de semana de 10:30 a 19:00). Entre sus funciones estará el control del acceso para garantizar que los perros tienen microchip, el reparto de bolsas para recoger los excrementos e informar a los bañistas.
Otro de los aspectos importantes es que habrá un servicio de limpieza específico para este espacio, que contará con un operario en turno de mañana y tarde. Su tarea será mantener limpios las zonas adyacentes a los accesos y el propio espacio, además de realizar un cribado manual de la arena que complementará el servicio de limpieza diario que lleva cabo un tractor. También se ha reforzado la limpieza de la parte del barrio más cercana a la playa, ya que el año pasado hubo bastantes quejas de los vecinos.
El mobiliario urbano también presenta algunas novedades. El abrevadero está adaptado para perros de todos los tamaños, el agua de la ducha sale a más presión y los urinarios tendrán una base de plástico en lugar de metálica, ya que se calentaban mucho y eran incómodos de utilizar.