Poco después de que la avenida Diagonal se abriera al tránsito, tras un día cortada por los restos de cera de la manifestación que pedía la liberación de los líderes de la ANC y Òmnium Cultural, unos 2.000 vecinos de Barcelona volvieron a ocuparla para defender la unidad de España.
Los manifestantes cortaron el tráfico y sólo dejaban pasar a los conductores que decían “viva España”, como se puede comprobar en un vídeo publicado en Twitter por la periodista Anna Vallhonesta.
La periodista, que estaba grabando como los manifestantes obligaban a los conductores a decit “viva España” para poder pasar, fue intimidada por varias personas, que le increparon y le pidieron que no grabara, a lo que ella respondió argumentando el derecho a informar.
En un segundo vídeo, se ve como un hombre le ataca con el mástil de una bandera española, mientras le pide que la bese. La periodista le pregunta si le está pegando con el palo y el susodicho le responde, mientas se coge de los testículos, que “con el palo te voy a dar”.
El ejercicio de la labor periodística se ha complicado considerablemente en el último mes en Barcelona, donde ciudadanos de diferentes ideologías políticas o territoriales tratan de boicotear la labor de los informadores que no son de medios afines a su pensamiento, como ya denunció Metrópoli Abierta.