El yate de Steve Jobs amarra en el puerto de Barcelona
En la cabina de mandos de la lujosa embarcación hay siete iMacs de 27 pulgadas
17 septiembre, 2018 18:25Noticias relacionadas
Ha llegado Venus al puerto de Barcelona. No se trata de la diosa romana, sino del yate de lujo del cofundador de Apple, Steve Jobs, que se quedará amarrado hasta finales de septiembre. La atípica embarcación cuenta con 78,20 metros de eslora y una capacidad para 12 viajeros que son atendidos por 22 tripulantes. En la cabina de mandos hay siete iMacs de 27 pulgadas cada uno liderando el yate que ha navegado por todo el mundo. Digno de veneración.
Situado en la calle Pepe Rubianes con el paseo Joan de Borbó, Venus ha elegido buenos compañeros con los que echar el ancla. Uno de ellos es Drangonfly, propiedad de uno de los fundadores de Google, y el otro es Azteca, propiedad de un magnate mexicano. Hay nivel.
UN PROYECTO DE 100 MILLONES DE EUROS
La idea del yate surgió en 2007, cuando el californiano tenía 52 años y era conocedor de su cáncer de páncreas. Para el proyecto, que costó más de 100 millones de euros, contó con la ayuda del diseñador industrial parisino Philippe Starck. Cada detalle está cuidado al milímetro, pues su amplia experiencia en yates no siempre fue agradable y quería construir el mejor de todos.
Se trata de una embarcación de líneas angulosas con la proa a la misma altura que el resto del casco y con un ventanal en cubierta de doce metros de largo por tres de altura. La perfección era tal que el mismo Steve Jobs –que murió el 5 de octubre de 2011– temió no poder ver acabada su creación.
De hecho, el barco se dio a conocer un año después de su fallecimiento en los astilleros holandeses Koninklijke. Al acto asistieron los actuales propietarios, su viuda Laurence Powell y sus tres hijos, que regalaron al personal encargado de la construcción un dispositivo Apple.