El frío invernal está al caer. El 'buen tiempo' que se ha vivido hasta ahora tiene las horas contadas. El anticiclón que ha afectado a Barcelona, y al resto de la península, ha empezado a moverse y ha dejado paso a una lengua de frío polar que ha irrumpido en Europa y que llegará al Mediterráneo entre el miércoles y el jueves.
Las previsiones apuntan a que las temperaturas bajaran entre 5 y 10 grados en la zona oriental de la península, aunque en la zona más próxima a la costa está bajada puede ser más moderada. Sin embargo, es muy probable que en la zona alta de la ciudad y en el Tibidabo la bajada sea importante y pueden llegar a producirse alguna helada nocturna.
A esta bajada de las temperaturas se unirá un fuerte viento, que hará que la sensación térmica sea inferior a los grados que marquen los termómetros. Y a ser un viento del norte, que llega directamente desde las zonas polares, traerá consigo unas
POCA LLUVIA
Pese a que se trata de un episodio que viene del norte, las previsiones apuntan a que será seco, por lo que las probabilidades de lluvia son escasas, excepto en las primeras horas del episodio, que podría caer algún chubasco aislado, pero muy probablemente lejos de Barcelona.
Los analistas creen que el episodio de frío empezará a remitir el viernes y el fin de semana las temperatura se recuperarán hasta los valores previos a la entrada de la ola de frío polar.
AVISOS
Para evitar que esta ola de frío pille desprevenidos a los ciudadanos, los institutos meteorológicos han lanzado alertas en las que se recuerda que el descenso de las temperaturas será considerable, que habrá que coger salir de casa con un buen abrigo y una bufanda y que el frío no será solo cuestión de las horas nocturnas. Durante el día también se notará el descenso de las temperaturas, muy acusado a primeras horas de la mañana y últimas horas de la tarde.
ATENCIÓN AL MAR
Los meteorólogos también avisan de la posibilidad de fuerte oleaje, con olas que pueden llegar a superar los 4 metros, por lo que será necesario tener mucha precaución su alguien opta por acercarse a las playa. El fuerte viento hará que sea peligroso estar cerca de las orilla del mar en toda la costa catalana, también en Barcelona.