Fallece, a los 114 años, el hombre más viejo del mundo

Estaba convencido de que, como mínimo, llegaría a 2020. Gustav Gerneth, el hombre más anciano del mundo, no podrá celebrar su 115 aniversario. Falleció el lunes 21 de octubre, casi una semana después de cumplir 114 años en Havelberg (Alemania), rodeado de su familia y del alcalde de esta bonita población de 6.000 habitantes, Bernd Poloski.

Gerneth era el hombre más longevo desde el fallecimiento, en enero, del japonés Masazo Nonaka, tres meses mayor que él. En su 114 aniversario se mostró muy jovial, según informa 65ymás.com.

“Estoy contento de haber tenido el gran privilegio de haberle podido felicitar personalmente por su 114 cumpleaños y me alegro de haberle visto de tan buen humor”, manifestó el alcalde de Havelberg, hace una semana.

MANTEQUILLA SÍ, MARGARINA NO

Gerneth, por su parte, bromeaba sobre los motivos de su longevidad. “No hay que sentarse sobre el trasero porque eso te deja rígido”, dijo el día que cumplió 100 años. Y, con tono solemne, destacaba la importancia de comer buena mantequilla, rechazando categóricamente la posibilidad de sustituirla por margarina.

El hombre más anciano del mundo vivió los grandes acontecimientos del siglo XX. Nacido el 15 de octubre de 1905 en Szczecin, ahora una ciudad polaca y entonces alemana, era maquinista de profesión. Sobrevivió a dos guerras mundiales. En la Segunda fue hecho prisionero y hasta 1972, año de su jubilación, trabajó en la central de gas de Havelberg.

Gerneth se casó en 1930 y su esposa falleció hace 31 años. En 1988. También enterró a los tres hijos que tuvo con ella y a una nieta.