El Hospital Clínic atiende el triple de agresiones sexuales que hace 15 años

Un 48% de las víctimas de agresiones sexuales atendidas por el Hospital Clínic de Barcelona entre enero y octubre aseguraron que no denunciarían el caso. En total, fueron 396 las personas víctimas de violencia machista entre principios de año y el mes pasado. En los últimos años, el centro ha atendido el triple de casos que hace 15 años.

Estos datos se han presentado este viernes en una rueda de prensa en este mismo hospital público barcelonés. En el acto, en el que ha estado presente la Consejera de Sanidad de la Generalitat, Alba Vergés, se ha detallado el contenido de los programas que desarrolla la unidad especializada del Clínic en la atención a las personas que puedan sufrir este tipo de agresiones.

DATOS DE LA VÍCTIMA

La tendencia a denunciar al agresor hace años que va cayendo y, según los datos presentados este viernes por el centro hospitalario, en los últimos cinco años ha disminuido un 31%. En este sentido, el estudio señala que la mayoría de las agresiones sexuales las sufren las mujeres (91%) y que más de la mitad de las víctimas son jóvenes menores de 25 años.

La agresión sexual más frecuente es la violación (68%) y el 32% de las víctimas conocen al agresor. La mitad de los casos de agresión se producen en domicilios, mientras que un 28% sucede en la vía pública.

SEGUIMIENTO

En el centro hospitalario barcelonés realizan un protocolo interno de atención a la persona que es agredida sexualmente y también de coordinación con los cuerpos policiales y judiciales. Este protocolo se activa cuando la víctima llega a urgencias.

Concretamente, el hospital Clínic ha desarrollado en los últimos tiempos dos programas para mejorar la atención de las víctimas de agresiones sexuales. El primero, es uno de seguimiento para la detección, profilaxis y tratamiento de enfermedades infecciosas de transmisión sexual en víctimas de agresión sexual. Y, el segundo, es otro de prevención y tratamiento de las secuelas psíquicas en mujeres que han sido víctimas de este tipo de agresiones.

EL PRIMER PROGRAMA

En el primer caso, lo primero que se le hace al / a la paciente es un análisis para saber si está en riesgo de infección por VIH, VHB u otras enfermedades de transmisión sexual y se le hace un plan de antibioterapia por dichas enfermedades si hay un criterio de riesgo de contagio.

A partir de aquí, esta persona deja urgencias y se le aplica un seguimiento ambulatorio. Este plan consiste, primeramente, en ofrecerle a la víctima un teléfono de contacto donde pueda llamar. En segundo lugar, se le programa una serie de análisis sanguíneos con serología y sífilis. Después, se le da los resultados de las pruebas de manera presencial o telefónica. Finalmente, en caso de dar positivo en alguno de los supuestos mencionados, interviene el infectólogo.

Y EL SEGUNDO

El segundo caso se trata de la atención y prevención de las secuelas psíquicas. Estos síntomas pueden aparecer inmediatamente después de la agresión o hasta semanas o meses después. A la hora de afrontar esta cuestión, los especialistas en la materia recomiendan siempre una evaluación e intervención preventiva y monitorizada de la evolución de la víctima.

En este caso tan delicado, en la rueda de prensa de este viernes se han dado algunos datos de especial interés al respecto. Estos datos se recogieron entre el 1 de enero y el 31 de octubre de este año. Por ejemplo, el 60% de las víctimas atendidas sufrió un episodio de estrés agudo. Otro 50% sufrió algun episodio de estrés postraumático (agudo, demorado, crónico o complejo). También se ha apuntado que las víctimas de agresiones sexuales pueden sufrir algun episodio depresivo mayor, disfunciones sexuales, otros problemas de salud mental (como autolesiones o intentos de suicidio) o cambios en las distintas áreas y en el funcionamiento de su vida privada.