El próximo miércoles, 22 de enero, el corte de la Meridiana promovido por grupos de CDR y otros colectivos independentistas cumplirá 100 días. Desde ese lejano día de octubre, ni Generalitat ni Ayuntamiento de Barcelona han sido capaces de garantizar el derecho a la libre circulación del resto de personas ni el funcionamiento normal de los comercios y bares y restaurantes de la zona. Tras más de tres meses con clausuras ininterrumpidas de la avenida, los comerciantes están más que hartos y exigen a las administraciones soluciones. Las ventas se han desplomado y en algunos establecimientos las caídas oscilan entre el 30 y el 40%.

Fuentes del Fabra Centre, la Unión de Comerciantes del paseo de Fabra i Puig explican que las afectaciones se producen sobre todo a los comercios de la parte de baja del paseo, los que están más cercanos a la Meridiana. Los principales problemas con los que se encuentran son que muchas personas no se acercan a esta zona por miedo a que haya disturbios, que los coches no pueden acceder y que las restricciones en las líneas de bus de TMB son habituales, añade un portavoz de la entidad comercial.

CAMBIAR DE PUNTO DE MANIFESTACIÓN

El eje comercial, que tiene a 60 establecimiento asociados, dice que defiende el derecho a manifestación y que en su entidad hay personas de todos los espectros políticos, pero no comprende que se permita cortar un mismo punto de la ciudad durante casi 100 días. "Barcelona es muy grande. Podrían manifestarse en otros puntos de la ciudad. Tenemos dudas que si el corte fuera en Via Laietana, por ejemplo, se hubiera permitido que durara más de tres meses", critican las fuentes consultadas.

COLLBONI, SIN RESPUESTA

Esta misma semana, Ciutadans ha visitado a los comerciantes de Fabra i Puig. La regidora Marilén Barceló ha lamentado que los comerciantes y restauradores "estén sufriendo pérdidas de hasta el 40% en su facturación, debido a los cortes continuos en la Meridiana por parte de los CDR. Llevan más de 90 días sufriendo esta situación. Y la única respuesta que encuentran por parte del gobierno municipal es pasividad y complicidad ante esos cortes. No les ayudan con ninguna medida concreta. Es vergonzoso que aquellos  que generan puestos de trabajo y pagan sus impuestos estén abandonados por parte de Ada Colau y Jaume Collboni".

Precisamente, este mediodía Metrópoli Abierta ha preguntado al primer teniente de alcaldía sobre los cortes de la Meridiana y la situación de los comerciantes, pero el edil ha ignorado la cuestión. "Ahora no. Me voy a pasear por el mercado", ha respondido Collboni en la presentación de los 180 años de la Boqueria

LOS RESTAURADORES, PERJUDICADOS

Durante más de dos meses, las manifestaciones se iniciaron a las 19.30 horas. Entonces, los comercios de proximidad eran los más afectados. Desde hace unas pocas semanas, el corte de los CDR empieza hacia las 20.00 horas. "Ahora perjudican especialmente a los restauradores", explican desde Fabra Centre. El presidente de Fabra Centre, Jordi Navarro, tiene tres establecimientos en la zona y su facturación ha caído. "Para salir a cenar, muchas personas cogen el coche privado. Como no se puede acceder, las afectaciones son importantes". Fuentes del eje comercial aseguran que la campaña de Navidad ha sido "floja".

A diferencia del centro de Barcelona, donde en octubre muchos comercios padecieron destrozos por los disturbios, en Fabra i Pug ningún comercio ha sufrido roturas o desperfectos, subrayan desde el eje comercial. En líneas generales, las concentraciones son pacíficas. Es habitual ver que los Mossos se despliegan por la zona -y a veces se han producido identificaciones, detenciones y algún que otro encontranazo-, pero los mayores problemas de seguridad se han producido cuando los ultras españolistas se han dejado ver por allí. También tuvo lugar el atropello de una manifestante. El conductor fue denunciado por los Mossos.

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