El Ayuntamiento de Barcelona ha vuelto a cerrar el acceso al pulpo del Parque de la Pegaso para realizar “trabajos puntuales”. Según ha avisado el consistorio, las obras tendrán una duración de cuatro semanas y el objetivo es, a su vez, incrementar la superficie de la zona.

La instalación se colocó en el espacio hace menos de un año y desde entonces no ha hecho más que acumular restricciones. La inversión municipal supuso unos 750.000 euros para el Ayuntamiento, según informa L'Exprés de Sant Andreu.

MÚLTIPLES QUEJAS

La estructura de hierro candente del parque de Barcelona se recalienta tanto debido a las altas temperaturas que es imposible poner las manos encima. Para más inri, los toboganes, con forma de tentáculos, no resbalan lo suficiente como para deslizarse. Es por eso que los niños no tardaron en lanzar sus opiniones tras pocos días de su apertura.

Esta área de juegos infantiles se enmarca en el Plan del Juego en el Espacio Público, que quiere hacer de Barcelona "una ciudad plenamente jugable”. Es el primero de los cuatro espacios de juego singulares que abrirán en la ciudad este año: el resto se ubicarán en Jardins de la Indústria, el Parc Central de Nou Barris y la avenida Meridiana.

Noticias relacionadas