Los trabajadores del servicio de bus de Barcelona dicen basta. Con una cifra registrada de 450 conductores de TMB de baja diariamente, han optado por salir a protestar entre los próximos 9 y 15 de marzo.
El estrés, las precarias condiciones de trabajo y la falta de descansos, entre otras razones, han llevado de manera definitiva e incontestable a una huelga en la que también se expresará el descontento por la implantación de la red ortogonal de bus.
SERVICIOS MÍNIMOS
El Departament de Treball ha exigido el establecimiento de unos servicios mínimos durante las jornadas de paros, ya que se trata de un "servicio básico esencial para la comunidad". Durante las reivindicaciones, se deberá mantener una "proporcionalidad", garantizando así "el personal estrictamente necesario para el funcionamiento" de dichos mínimos.
El colectivo de Agents de Centre y Tècnics Polivalents deberá ofrecer unos servicios mínimos del 50% sobre el habitual que prestan diariamente.
Además, de insta a la compañía a dar "publicidad suficiente" a la huegla para que al ciudadanía tenga conocimiento de ella.