El conseller de Interior, Miquel Buch, ha alegado que ha habido un "problema técnico" en el anuncio de una retribución especial para los empleados públicos que han trabajado en la lucha contra el coronavirus, debido a que la policía tiene su propia mesa de la función pública.
El Govern anunció hace días que destinará 45 millones a una retribución de unos mil euros brutos a unos 45.000 trabajadores públicos, como personal sanitario, bomberos y protección civil y que inicialmente excluía a los Mossos, lo que generó indignación y malestar en la cúpula y en los agentes de este cuerpo.
"HABRÁ QUE ENCONTRAR SOLUCIONES"
El pasado fin de semana, el ejecutivo catalán ya avanzó que revisaría esta recompensa ante las críticas de los Mossos, y hoy Buch ha insistido en declaraciones a Ràdio 4 que habrá que "encontrar soluciones", porque no es "justo" que se excluya a la policía catalana.
El titular de Interior ha esgrimido que ha habido un "problema técnico", ya que el conjunto de los trabajadores parten de la mesa de la función pública, incluidos el cuerpo de Bomberos y Protección Civil que dependen de su departamento.
Por ello, ha agregado, cuando se hizo esta propuesta de retribución para estos trabajadores públicos "quedan excluidos los Mossos, porque tienen su propia mesa de la función pública".