Un mando de los Mossos, condenado por agresiones
El jefe del ARRO, Jordi Arasa, ha sido sentenciado a dos años y cuatro meses de cárcel por aporrear a indignados en plaza de Catalunya en 2011
9 junio, 2020 10:49Noticias relacionadas
El inspector de los Mossos d'Esquadra y actual máximo responsable del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), Jordi Arasa, ha sido condenado a dos años y cuatro meses de cárcel por agresiones a manifestantes durante el desalojo de la concentración del 15M en la plaza de Catalunya, en la primavera de 2011. Arasa tampoco podrá ejercer de policía u ocupar otro cargo público durante la condena.
Arasa fue juzgado a principios de este año en la Audiencia de Barcelona tras ser acusado de haber agredido a, al menos, cinco personas. La condena es por dos delitos de lesiones. Las víctimas deberán ser indemnizadas con un total de 1.560 euros.
La Audiencia de Barcelona condena a 2 años y 4 meses de prisión un subinspector del cuerpo de @mossos por el desalojo de la plaza Catalunya
— TSJCat (@tsj_cat) June 9, 2020
Según la sentencia, sus acciones fueron "injustificadas" y no se produjeron incidentes que justificaran las cargas policiales. Ese día, casi todos los concentrados se sentaron en el suelo de la plaza y aledaños, protestando de forma totalmente pacífica.
CONDENADO POR AGREDIR A DAVID FERNÀNDEZ
El mando de la policía autonómica ha protagonizado diversas actuaciones polémicas y ya fue condenado por causar lesiones al exdiputado de la CUP, David Fernàndez, durante el mismo desalojo de la plaza de Catalunya, que tuvo lugar el 26 de mayo de 2011, y en el que efectivos de las fuerzas de seguridad hicieron un uso totalmente desproporcionado de la violencia.
El pasado enero, Metrópoli Abierta se hizo eco de la denuncia de la diputada de la CUP, Natàlia Sánchez, que acusó a Arasa de increpar a diputados en el parque de la Ciutadella.
Arasa fue ascendido a jefe de la ARRO y de subinspector -el cargo que ostentaba cuando se produjeron los hechos- a inspector el pasado mes de marzo,15 días después de que el juicio quedara visto para sentencia. La decisión judicial se puede recurrir.