El gobierno de Ada Colau ha decidido aplazar otros dos meses los pagos de alquiler y de las hipotecas de las personas y familias que viven en pisos de titularidad municipal en Barcelona.
La moratoria, puesta en marcha para paliar los efectos de la Covid-19, estaba vigente hasta el 31 de julio y ahora se prorroga hasta el 30 de septiembre. La decisión no supone una condonación de la deuda.
UN NUEVO DECRETO
El nuevo aplazamiento aparece publicado en un decreto municipal, firmado por la alcaldesa Colau el 28 de julio y publicado este 30 de julio en la Gaseta Municipal, el boletín oficial del Ayuntamiento.
La medida afecta "con carácter general al conjunto de personas arrendatarias y adquirientes del parque municipal de viviendas", dice el decreto. También incluye a los titulares de locales del parque público. Las personas en situación de vulnerabilidad económica no tienen que hacer ninguna solicitud previa.
MÁS DE 7.000 FAMILIAS
De la citada moratoria se pueden beneficiar más de 7.000 familias, dice la alcaldesa. Sin embargo, quedan excluidos los inquilinos de 1.300 pisos sociales dotacionales con servicios para la gente mayor.
Según el texto, estas personas "no se encuentran, y no se pueden encontrar, en la situación de vulnerabilidad" definida en el artículo 16 del Real decreto ley 11/2020, aprobado por el Gobierno central para hacer frente a las consecuencias sociales y económicas de la pandemia, subraya el decreto. Las situaciones de vulnerabilidad económica se refieren a estar en paro o a pérdidas de un 40% de los ingresos en casos de ser titulares de negocios
El citado documento supone la modificación del decreto de alcaldía del pasado marzo. En éste se especifica un artículo único: "una moratoria general de seis meses, de abril a septiembre, en el pago de las cuotas de las vivienda y locales del parque público municipal. La medida supone que el Ayuntamiento dejará de emitir los correspondientes recibos durante el periodo estipulado.
EL PAGO, EN LOS SIGUIENTES 54 MESES
El gobierno de Colau establece que los alquileres y las cuotas hipotecarias que se aplazan se tendrán que pagar en los siguientes 54 meses, entre octubre de 2020 y marzo de 2025, y siempre dentro del tiempo de vigencia del contrato de alquiler o de préstamo.